Tegucigalpa, Honduras.
Con la recomendación de “pensar en su vida y en la de los demás”, la Comisión Nacional de Prevención en Movilizaciones Masivas (Conapremm) inició ayer el operativo de Semana Santa con la presencia de unos 27,00 voluntarios en casi cien municipios del país.
La organización, que aglutina a 23 instituciones del Estado, dio el banderillazo en la posta de El Durazno, en la salida al norte, y desde ayer mismo decenas de familias comenzaron a desfilar en sus carros, unos a sus comunidades y otros a los centros turísticos. Este movimiento de personas, que según la Secretaría de Turismo sumará unos 3.6 millones, será vigilado por 10,425 centros de atención ciudadana y de orientación y por retenes policiales ubicados cada 15 o 20 kilómetros.
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En las principales carreteras, un escuadrón de drones vigilará desde los aires la velocidad de los carros, y los motoristas que se conduzcan de manera irresponsable serán detenidos y sus licencias decomisadas, advirtió Gerson Velásquez, titular de la Dirección Nacional de Vialidad y Transporte (DNVT). Informó que las oficinas de Tránsito de Tegucigalpa, San Pedro Sula y La Ceiba estarán abiertas para atender a quienes quieran renovar sus licencias.
Por su parte, la responsable del Instituto Hondureño de Transporte Terrestre, Pyubani Williams, informó que a la fecha ya fueron revisadas 3,800 unidades de transporte.
