Tegucigalpa, Honduras
Una nueva controversia en diversos sectores de la sociedad desató la admisión de un nuevo recurso de inconstitucionalidad, que busca que en Honduras se legalice el matrimonio entre parejas del mismo sexo.
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La admisión de tres recursos no significa que las bodas entre parejas del mismo sexo son permitidas, sino que la petición cumplió con todos los parámetros exigidos por la Ley de Justicia Constitucional.
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La Sala Constitucional de la Corte Suprema de Justicia admitió el nuevo recurso de inconstitucionalidad contra los decretos legislativos 176-2004 y 35-2013 emitidos por el Congreso Nacional que prohíben la unión civil entre personas del mismo sexo. Es el tercer escrito que se presenta en ese sentido.
El documento fue presentado el año anterior por Donny Ramón Reyes y Alex Eduardo Sorto, quienes actúan en su condición de representantes de la Asociación LGTB Arcoíris de Honduras. Los jueces harán un estudio profundo para emitir un fallo que puede terminar con la declaratoria de inconstitucionalidad de los decretos que prohíben el matrimonio gay o en su defecto pueden reafirmar la legalidad de ambos.
Reacciones. Para las asociaciones que defienden el matrimonio igualitario, es un anhelo que las leyes hondureñas reconozcan sus derechos a formar una familia y a reivindicar su participación en la sociedad.
“Nosotros lo que abogamos es que exista la figura para poder casarse, lo que buscamos es que una vez uno parta de este mundo la otra persona tenga derechos”, expresó Vidal Martínez, de la comunidad LGTB.
En tanto, la Confraternidad Evangélica de Honduras rechaza la iniciativa. “Para la Iglesia es preocupante que la Sala Constitucional haya dado este paso, esperamos que puedan, al final, tomar una decisión que reafirme el no permitir que se legalicen en el país el matrimonio entre personas del mismo sexo”, manifestó el pastor Alberto Solórzano.
