San Pedro Sula, Honduras.
Todas las personas están expuestas a inhalar el monóxido de carbono (CO) que está en el ambiente debido a la emisión que los vehículos emiten, sin embargo, en los hogares también hay fuentes que emanan ese contaminante, el cual en grandes cantidades puede causar la muerte.
Aunque los vehículos y las chimeneas de las fábricas son las principales fuentes de emisión de gas; los anafres, los fogones, las plantas eléctricas que trabajan a base de gasolina, las estufas que utilizan gas kerosene y la quema de basura o cualquier otro aparato que produzca la quema de combustible fósil son causantes de afecciones como dolores de cabeza, vómitos, pérdida de sensibilidad, hasta infartos.
La doctora Luisa María Pineda, epidemióloga del Mario Rivas, explicó que los efectos en el organismo son de acuerdo a la cantidad de monóxido de carbono que se inhale; “si es una intoxicación grave, pues la persona muere, una leve cantidad puede causar daños al cerebro y desmayos; esto afecta más a las personas que tienen enfermedades respiratorias crónicas”.
En el hospital Rivas no se reportan casos de inhalación por CO, sin embargo, Pineda dijo que no es que no se den, sino que es difícil dar un diagnóstico, pues los síntomas son los similares a otras enfermedades. El Cuerpo de Bomberos tampoco reporta muchos casos.
El coronel Marco Antonio Artica dijo que es difícil que se den los casos, “hemos atendido casos en personas que se dedican a limpiar cisternas y usan bombas a base de gasolina para sacar el agua, pero son pocos”. Artica dijo que en las casas son pocos, debido a que las personas mantienen ventilados los hogares, pero explicó que se deben tomar medidas para evitar la inhalación. “Lo primero que se debe hacer es acudir al hospital o centro asistencial más cercano”, dijo.
Todas las personas están expuestas a inhalar el monóxido de carbono (CO) que está en el ambiente debido a la emisión que los vehículos emiten, sin embargo, en los hogares también hay fuentes que emanan ese contaminante, el cual en grandes cantidades puede causar la muerte.
| “La muerte dulce”
Debido a sus características, los afectados no pueden detectar que están inhalando el gas tóxico.
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La doctora Luisa María Pineda, epidemióloga del Mario Rivas, explicó que los efectos en el organismo son de acuerdo a la cantidad de monóxido de carbono que se inhale; “si es una intoxicación grave, pues la persona muere, una leve cantidad puede causar daños al cerebro y desmayos; esto afecta más a las personas que tienen enfermedades respiratorias crónicas”.
En el hospital Rivas no se reportan casos de inhalación por CO, sin embargo, Pineda dijo que no es que no se den, sino que es difícil dar un diagnóstico, pues los síntomas son los similares a otras enfermedades. El Cuerpo de Bomberos tampoco reporta muchos casos.
El coronel Marco Antonio Artica dijo que es difícil que se den los casos, “hemos atendido casos en personas que se dedican a limpiar cisternas y usan bombas a base de gasolina para sacar el agua, pero son pocos”. Artica dijo que en las casas son pocos, debido a que las personas mantienen ventilados los hogares, pero explicó que se deben tomar medidas para evitar la inhalación. “Lo primero que se debe hacer es acudir al hospital o centro asistencial más cercano”, dijo.
