Aumentar la actividad física protege el corazón de los adultos mayores

La Asociación Americana del Corazón recomienda al menos 150 minutos de actividad física aeróbica de intensidad

Estados Unidos

Si está a principios de la sesentena, hacerse más activo podría reducir su riesgo de enfermedad cardiaca, informan unos investigadores.

Esto es particularmente así para las mujeres, añadieron.

'El rango de edad de los 60 a los 64 años representa una transición importante entre el trabajo y la jubilación, cuando las conductas del estilo de vida tienden a cambiar. Por tanto, podría ser una oportunidad para fomentar un aumento en la actividad física', planteó el autor del estudio, Ahmed Elhakeem.

'Además, el riesgo de enfermedad cardiovascular es más alto en los adultos mayores. Es importante comprender cómo la actividad podría influir en el riesgo en ese grupo de edad', dijo Elhakeem. 'Encontramos que es importante reemplazar el tiempo que se pasa de forma sedentaria con una actividad de cualquier nivel de intensidad'.

Elhakeem es asociado principal de investigación en epidemiología en la Facultad de Medicina de la Universidad de Bristol, en Inglaterra.

El estudio, publicado el 8 de agosto en la revista Journal of the American Heart Association, incluyó a más de 1,600 británicos de 60 a 64 años de edad que usaron sensores de la frecuencia cardiaca y del movimiento durante cinco días.

Se realizaron análisis sanguíneos de señales clave de la enfermedad cardiaca: la proteína C reactiva y la interleucina 6 (IL-6), que son marcadores de inflamación; el activador tisular del plasminógeno (ATP) y la E-selectina (una molécula que tiene un rol importante en la inflamación), que son marcadores de la función de los vasos sanguíneos; y la leptina y la adiponectina, que son marcadores del colesterol.

'Nos enfocamos en esos biomarcadores de la aterosclerosis porque se han estudiado menos y se ha mostrado que predicen el riesgo de eventos cardiovasculares y muerte', comentó Elhakeem en un comunicado de prensa de la revista.

El estudio encontró que:

Cada 10 minutos adicionales de actividad de moderada a vigorosa se asociaban con unos niveles de leptina que eran un 3.7 por ciento más bajos en los hombres y un 6.6% más bajos en las mujeres.

Cada 10 minutos adicionales de inactividad se asociaron con un aumento del 0.6% en los niveles de IL-6 de los hombres y un aumento del 1.4% en los niveles del IL-6 de las mujeres. Cada 10 minutos adicionales de actividad de intensidad leve se asociaron con una reducción del 0.8% en los niveles de ATP en ambos sexos.

En general, un mayor tiempo de actividad de intensidad baja y menos tiempo de inactividad se asociaron con unos mejores niveles de IL-6 y de ATP, independientemente de la cantidad de actividad de una mayor intensidad. Los investigadores dijeron que los hallazgos sugieren que la actividad física podría reducir el riesgo de enfermedad cardiaca en las personas de 60 a 64 años de edad al mejorar la función de los vasos sanguíneos.

La Asociación Americana del Corazón (American Heart Association) recomienda al menos 150 minutos de actividad física aeróbica de intensidad moderada o 75 minutos de actividad física aeróbica de intensidad vigorosa a la semana, o una combinación de ambas cosas, además de ejercicio para fortalecer los músculos dos o más días a la semana.