La 'súper gonorrea' es una amenaza, y muchos siguen recibiendo los antibióticos equivocados

Una forma de ralentizar el avance de la gonorrea a una resistencia total a los antibióticos es cumplir con el régimen de tratamiento recomendado

Estados Unidos


Cuando un hombre británico que permanece en el anonimato contrajo una forma de 'súper gonorrea' resistente a los antibióticos que se utilizan comúnmente para tratarla, la noticia provocó preocupación entre médicos y microbiólogos de todo el mundo.

Esta semana, los médicos curaron la enfermedad de transmisión sexual (ETS) del hombre utilizando un antibiótico llamado ertapenem, pero afirmaron que el caso es 'una importante llamada de atención para todos'.

Una forma de ralentizar el avance de la gonorrea a una resistencia total a los antibióticos es cumplir con el régimen de tratamiento recomendado. Pero los nuevos datos publicados el jueves encuentran que esto no se hace en 1 de cada 5 casos de gonorrea en Estados Unidos.

En un 19% de los casos revisados, los pacientes no recibieron la terapia antibiótica dual con ceftriaxona-azitromicina recomendada por los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de Estados Unidos, informaron investigadores de la agencia.

En la mayoría de casos de gonorrea, los pacientes 'deben ser tratados con el régimen recomendado para garantizar un tratamiento efectivo y también para ayudar a prevenir el surgimiento de resistencia antimicrobiana', señaló un equipo dirigido por Emily Weston, investigadora de enfermedades de transmisión sexual (ETS) de los CDC.

Según la agencia, en 2016 se reportaron casi 470,000 casos de gonorrea en Estados Unidos, un aumento de un 18.5 por ciento en el año anterior. Además, la bacterias 'han desarrollado progresivamente resistencia a la mayoría de antimicrobianos', dijeron Weston y sus colaboradores.

Para averiguar más sobre cómo las clínicas tratan la enfermedad, los investigadores observaron los expedientes médicos de más de 3,200 casos tratados en siete regiones a lo largo de Estados Unidos.

Encontraron que las recomendaciones de los CDC se cumplían un 81 por ciento de las veces, y que un tratamiento adecuado era mucho más probable en las clínicas que se especializaban en ETS y/o la salud reproductiva que en otros lugares. En esas clínicas, el cumplimiento superó el 90%.

'Estos hallazgos subrayan que las clínicas de ETS y de salud reproductiva con fondos públicos ofrecen una atención de calidad para las ETS', afirmó la directora ejecutiva interina Laura Hanen, de la Asociación Nacional de Funcionarios de Salud de Condados y Ciudades (National Association of County and City Health Officials).

'Pero necesitamos que en todos los ámbitos de la atención de la salud rindan a este nivel, con el fin de tratar la gonorrea de forma efectiva, prevenir las nuevas infecciones, y ralentizar la amenaza de gonorrea resistente a los medicamentos', añadió en un comunicado de prensa de la asociación.

Cuando los pacientes no recibieron la terapia dual con ceftriaxona-azitromicina recomendada, con frecuencia solo recibían un antibiótico, encontró el estudio de los CDC. En un 3% de los casos, los pacientes solo fueron tratados con azitromicina, y en poco más de un 1% de los casos, los pacientes recibieron doxiciclina. Ambos tratamientos podrían aumentar las probabilidades de que la bacteria de la gonorrea desarrolle una nueva resistencia, potencialmente peligrosa, a los antibióticos, anotó el equipo de los CDC.

La amenaza de cepas de gonorrea resistentes a todos los antibióticos es preocupante y real, advirtió el doctor Bruce Farber, jefe de enfermedades infecciosas en el Hospital de la Universidad de North Shore en Manhasset, Nueva York.

'La gonorrea resistente ya está por todas partes en Estados Unidos', dijo Farber. 'Quizá no sea una cepa como sobre la que acaba de leer en Reino Unido, que es extraordinaria, pero aun así en general estos casos están ocurriendo'.

Mientras tanto, la propagación de la gonorrea se puede prevenir mediante el uso de preservativos, enfatizó Farber.

El Dr. Edward Hook, experto en enfermedades infecciosas en la Universidad de Alabama en Birmingham, dijo que la gonorrea por lo general se presenta con síntomas como sensaciones de ardor al orinar o flujos del pene o la vagina. Pero muchas personas no tienen síntomas o no se dan cuenta de que tienen una infección.

'Las personas que tienen sexo con más de una persona durante un cierto periodo deben, por su propio bien, hacerse una revisión de salud, incluso si no tienen síntomas', planteó Hook. 'Una de las grandes barreras al abordar este problema es que a veces las personas sienten cierta vergüenza al pedir que les hagan pruebas de las infecciones de transmisión sexual. Creo que se trata de algo que debemos superar'.

Los hallazgos de los CDC aparecen en la edición del 27 de abril de la revista Morbidity and Mortality Weekly Report de la agencia.