Un muerto en un tiroteo y cerca de 580 detenidos fue el balance de una noche de extrema violencia en Chile, en la que dos iglesias de la capital fueron quemadas y se registraron saqueos y barricadas por todo el país durante la conmemoración del primer aniversario del llamado 'estallido social'.
2 / 13
Una iglesia consumida por el fuego, y otra muy dañada fue el resultado de ataques violentos de grupos de encapuchados mientras del otro lado de la manifestación familias completas bailaban y celebraban.
3 / 13
'Quemar iglesias es una expresión de brutalidad', afirmó el ministro del Interior y Seguridad, Víctor Pérez, al destacar que durante la jornada se resguardaron las estaciones del Metro de Santiago, los autobuses del transporte público y otros blancos de los violentos ataques el año pasado.
4 / 13
La pequeña iglesia de la Asunción -construida en 1876- resultó completamente destruida. Cuando su cúpula cayó en llamas tras el colapso de la estructura, varios manifestantes celebraron tras haber gritado '¿Que caiga, que caiga!'.
5 / 13
Otro templo, de Carabineros, también fue saqueado e incendiado, resultando muy dañado.
6 / 13
Los desmanes, que comenzaron cuando cayó la tarde y se extendieron a otra ciudades como Antofagasta, Concepción, Valparaíso y Viña del Mar, ensombrecieron una jornada que transcurrió desde temprano y durante horas en un ambiente muy festivo y familiar, con decenas de miles de personas blandiendo banderas y pancartas a favor de una mayor igualdad social.