Las instalaciones de la cárcel de máxima seguridad ubicada en Támara es el nuevo destino de los criminales de alta peligrosidad.
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El módulo penitenciario de Támara tiene capacidad para albergar a 208 reclusos.
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El recinto de máxima seguridad cuenta con varias áreas, como ser un centro de control y monitoreo, locutorios, consejo técnico interdisciplinario, cocina y áreas para tomar el sol.
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Los reclusos reciben aire fresco y sol en celdas especiales al aire libre.
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Las instalaciones de El Pozo III cuemplen con los estándares internacionales para las cárceles de este tipo.
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Los reclusos recibe tres tiempos de comida elaborada en la cocina general.
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La comida es acompañada de agua y es la misma para todos.
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Está prohibido el ingreso de alimentos no autorizados a las celdas de los reclusos. nadie tiene ningún privilegio informó el Instituto Nacional Penitenciario (INP).
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En las celdas caben dos reclusos y miden 2 metros de ancho por 2.20 metros de largo.
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Las instalaciones cuentan con dos camarotes de piedra con colchonetas; también un lavamanos y un sanitario de acero inoxidable.
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Los reclusos están sometidos a un estricto régimen de seguridad.
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Los reclusos de El Pozo III tienen derecho a una hora de sol que cumplen en celdas especiales.
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Los reos no tienen derecho a tener celulares, televisores ni radios
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En el módulo de máxima seguridad de Támara, aparte de cumplir con todos los estándares de calidad internacional requeridos, se vela por el cumplimiento de los derechos humanos.
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Se cuenta con un equipo técnico interdisciplinario que incluye médicos generales, odontólogos, enfermeras, psicólogos, trabajadores sociales y abogados, en procura de tener una atención directa cuando lo requieran los privados de libertad.
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Los internos tienen el derecho de tener una visita al mes, en espacios sin contactos físicos. De esa forma se evitará que manden mensajes codificados a los compinches que están en el exterior.