Sí, los peludos también pueden sufrir un resfriado

Los médicos veterinarios dan algunos consejos para cuidar a sus animales. Nunca se les debe suministrar medicamentos de humanos

Redacción

Tomar las precauciones adecuadas en caso de un resfrío no debería ser diferente en el caso de los perros o los gatos.

Parecen resfriados, pero en realidad “se trata de infecciones virales o bacterianas”, expresó el veterinario Andreas Moritz.

Si un perro o gato tiene síntomas de resfriado se ha infectado por otros animales.
El resfriado más común en los perros es la llamada tos de las perreras.

La característica clásica es una tos muy seca. “Cuando los ganglios linfáticos se inflaman, los perros a veces comienzan a ahogarse”, advierte Astrid Behr, de la Asociación Federal de Veterinarios.

También pueden ser síntomas la pérdida de apetito, la apatía o la fiebre. Hay que recordar a los dueños que si el perro enferma deben visitar a un veterinario. “Si empeora puede convertirse en neumonía”, prosigue el doctor Moritz.

Alerta. El termómetro no debe colocarse bajo ninguna circunstancia bajo la lengua. Los perros y los gatos podrían morderlo. “La fiebre se toma en el ano en estos animales y a veces los gatos se defienden”, explica Behr.

La temperatura normal de un perro adulto sano es de entre 38 y 39 grados. A partir de qué temperatura comienza un perro a tener fiebre varía según el tamaño. “En los cachorros y los perros con un cuerpo más pequeño, la fiebre comienza alrededor de un incremento de 0.2 grados porque tienen un metabolismo aumentado”, detalla Behr.

Sin embargo, a partir de los 39 grados ya se puede considerar como fiebre, y si sube aún más hay que ir a la veterinaria. A partir de los 42 grados hay un grave peligro para la vida del animal. Además de fiebre, pueden sufrir vómitos y diarrea. Como regla general, lo mejor es visitar a un veterinario.

La enfermedad clásica del gato es la gripe felina. Esta afecta a las vías respiratorias y las membranas mucosas. Los gatos infectados respiran por la boca, por ello el líquido puede salir por los ojos y la nariz. La mayoría de las enfermedades animales con síntomas de resfriado pueden tratarse con medicamentos. También existen vacunas para ello.

Descanso. Las mascotas con resfriados deben dormir bastante y beber mucha agua para estar hidratadas. El agua les ayudará a diluir la mucosidad y reducir ligeramente su temperatura corporal.

Remedios. Si su perro tose mucho dele una cucharadita de miel, este es uno de los remedios para el resfriado en perros más eficaz. También puede darle un caldo de pollo para que disminuyan sus secreciones nasales. DPA