Los juguetes deben ser seguros

Cuidado con los juguetes que tienen baterias

  • 26 dic 2017

A medida que queda menos tiempo para comprar los regalos de la época de fiestas, quizá tenga la tentación de comprar cualquier cosa que quede en la estantería. Pero con respecto a los juguetes, tenga en cuenta la seguridad, enfatizan los expertos en salud.

El primer paso es comprobar la recomendación de edad en la etiqueta del juguete.

'Los padres con frecuencia creen que su hijo ’crecerá con’ un juguete, pero eso puede ser peligroso con algo como una bicicleta, si el niño no tiene la habilidad de controlarla', dijo Susan Rzucidlo, enfermera practicante en Penn State Pediatrics, en un comunicado de prensa de la universidad.

Cuando hay un juguete en casa, también es importante que los niños pequeños no accedan a los juguetes de los niños mayores.

Amy Bollinger, directora del Programa de Prevención de Traumatismos y Lesiones Pediátricas del Hospital Pediátrico de la Universidad Estatal de Pensilvania, dijo que 'es apropiado desde el punto de vista del desarrollo que un niño pequeño se ponga todo en la boca. Si ese niño pequeño agarra un juguete que pertenece a un hermano mayor y se lo pone en la boca, se puede atragantar'.

Vigile también por si hay otros peligros de atragantamiento.

Un modo sencillo de ver si un juguete tiene un riesgo de atragantamiento es comprobar si pasa por un tubo de papel higiénico. Si pasa, no es seguro para los niños menores de 3 años.

Rzucidlo indicó que 'los culpables habituales son los juguetes con partes pequeñas que se pueden quitar. Por ejemplo, muchos juguetes más recientes e incluso las tarjetas de felicitación tienen pilas de botón, que se pueden tragar con facilidad. Algunas están escondidas, pero otras son bastante accesibles'.

Los globos de látex también son una causa habitual de atragantamiento en los niños.

Los imanes pequeños son otro tipo de amenaza relacionada con los juguetes. Si se tragan dos o más, puede atraerse entre sí a través de las paredes intestinales, y provocar un agujero, un bloqueo o una infección.

Compruebe que los juguetes no contengan sustancias tóxicas. Por ejemplo, compruebe si tienen ftalatos. Se usan mucho en el plástico. Los productos de la pintura de los juguetes antiguos también pueden ser una amenaza.

'Hasta hace apenas 10 años, las directrices de lo que constituía un juguete seguro eran muy diferentes', dijo Bollinger. 'Los juguetes más antiguos podrían contener plomo u otras sustancias tóxicas'.