El príncipe Carlos de Inglaterra, heredero al trono británico, mandó a construir una mansión de doce mil acres, unos 48 millones de metros cuadrados, en Inglaterra.
Esta casa será para cuando su hijo mayor, el príncipe William, se case con su novia, la aristócrata Kate Middleton.
Según informó la prensa británica, Carlos gastó unos 30 millones de dólares en la construcción de la mansión entre los pueblos de Monmouth y Roos-on-Wye, en Harewood, en el condado de Hertfordshire, donde vivirán una vez casados William y Kate, ambos de 24 años.
La mansión será construida en el estilo neo-georgiano y contará con una capilla, establos, piscina y varias habitaciones y salones de gala, a fin de que los enamorados, cuya posible boda se visualiza para el próximo año, vivan como se merecen.
“Esta mansión será para William y su esposa”, declaró una fuente allegada a la construcción al dominical Mail on Sunday.
“Ya todos aquí lo sabemos y creemos que será perfecta para ellos”, agregó.
El anuncio del compromiso está fijado para la primavera, es decir, a finales de octubre.