Los cuatro magistrados de la Sala de lo Constitucional destituidos en un madrugrón legislativo el pasado miércoles recibieron el respaldo de sus compañeros de la Corte Suprema de Justicia, quienes calificaron la decisión del Congreso Nacional de atentatoria “contra la independencia del Poder Judicial”.
“Frente a la decisión de un Poder del Estado que resultó en la sustitución de cuatro magistrados de la Sala de lo Constitucional, consideramos que la misma no es consecuente con la institucionalidad democrática y atenta contra la independencia del Poder Judicial”, cita un fragmento del comunicado hecho público ayer por un grupo de magistrados.
El mismo fue dado a conocer en una comparecencia ante periodistas por parte de los magistrados Jacobo Cálix, Raúl Henriquez, Víctor Manuel Martínez y Marco Vinicio Zúniga, quienes firmaron el comunicado junto con: Tomás Arita Valle, Edith María López y Rosa de Lourdes Paz.
El comunicado no fue firmado por Óscar Chinchilla, Carlos Cálix y Jorge Reyes. Tampoco lo hizo el presidente de la Corte, Jorge Rivera Aviles, quien se solidarizó por aparte.
Los magistrados excusaron a Carlos Cálix, quien se encuentra fuera del país, y Reyes, quien está incapacitado.
Los magistrados recuerdan que Honduras es un Estado de Derecho, cuya forma de gobierno republicana, democrática y representativa se ejerce por tres poderes independientes, complementarios y sin relaciones de subordinación. Que la complementariedad no significa sumisión, de ninguna forma, de uno a otro poder del Estado. Además, que el sistema democrático requiere, necesariamente, para su consolidación jurídica “controles democráticos” que son los pesos y contrapesos. Los profesionales enfatizan que “hoy en día la democracia es el gobierno de las mayorías, pero con respecto a las minorías y sus derechos, lo cual debe garantizar el Poder Judicial a todos los ciudadanos y ciudadanas”.
Recalcan que la independencia judicial no es un privilegio de los jueces y magistrados, sino un derecho de los ciudadanos y ciudadanas, para que los casos que son llevados al orden jurisdiccional sean resueltos sin interferencias indebidas de ninguna otra autoridad o personas particulares, sino únicamente de acuerdo a los hechos probados del caso y en aplicación del ordenamiento jurídico.
“Finalmente, en razón de los acontecimientos políticos que se han suscitado, los magistrados y magistradas que integramos la Corte Suprema de Justicia reiteramos al pueblo hondureño nuestro compromiso de seguir resolviendo todos los asuntos sometidos a nuestro conocimiento con la objetividad, imparcialidad e irrestricto apego a la Constitución y a las leyes de la República, sin importar las consecuencias que de ello deriven, aprovechando la oportunidad para recordar a los otros poderes del Estado, que el ejercicio efectivo y el respeto mutuo a una verdadera independencia de poderes es fundamental para fortalecer la democracia, la libertad y la paz social de nuestro país”, concluyeron.
Encerrona
Las muestras de apoyo al final de la tarde ocurrieron luego de una reunión entre magistrados, supuestamente en la casa de uno de ellos, en donde participaron ocho de ellos, incluido Avilés.
Después hubo otra encerrona sin el presidente. En estas reuniones no estuvieron al menos cuatro magistrados, uno porque goza de incapacidad, otro que está fuera del país y el único que quedó en la Sala de lo Constitucional.
