23/04/2024
09:52 AM

Las grandes empresas no pagan tan bien como solían hacerlo

¿Por qué las grandes empresas dejaron de pagar mucho más que las más pequeñas? Investigan el cambio de una economía manufacturera a una de servicios

Nueva York, Estados Unidos.

Durante gran parte del siglo XX, a los trabajadores de las grandes empresas se les pagó mejor que a los trabajadores de las pequeñas. Pero la brecha salarial entre las empresas grandes y chicas se ha reducido, y esa es una de las causas de la desigualdad creciente en Estados Unidos.

La brecha se ha achicado desde fines de la década de 1980, según un documento de investigación reciente de J. Adam Cobb, de la Universidad de Pensilvania, y Ken Hou Lin y Paige Gabriel, de la Universidad de Texas. Los trabajadores mejor remunerados en las empresas grandes todavía ganan un poco más que sus contrapartes de empresas más pequeñas. El cambio se ha dado en la prima de pago de sus colegas más abajo en la escala salarial.

¿Por qué las grandes empresas dejaron de pagar mucho más que las más pequeñas? En un estudio que se publicará pronto, Nicholas Bloom, de Stanford, responsabiliza al cambio de una economía manufacturera a una de servicios.

Las grandes empresas de servicios históricamente han pagado mejor que sus competidoras más pequeñas, pero la brecha nunca fue tan grande como en manufactura. Sugieren que las grandes firmas dejaron de pagar tanto a sus empleados de niveles más bajos porque se reorientaron en torno a sus principales competencias.

La teoría es que la prima salarial de las grandes empresas se debía principalmente a que las firmas tenían muchos tipos de trabajadores. Por ejemplo, si una empresa grande tenía trabajadores de cafetería en su nómina, sentía la presión de no dejar caer demasiado sus salarios, porque la desigualdad era mala para la moral.

Pero cuando aparecieron las empresas de servicios de comida corporativa contrataron empleados al precio del mercado de ese momento, sin ninguna prima salarial. Y las empresas grandes empezaron a comparar el costo de los empleados con la ayuda de estos servicios de comida. A medida que esas empresas se reestructuraron en torno a una o pocas competencias, los salarios convergieron hacia la tasa de mercado.

El año pasado, un informe de la Casa Blanca, de Obama, adelantó una teoría distinta. Los autores citaron una “preocupación creciente” entre los economistas por la falta de competencia, que puede cambiar “el equilibrio del poder de negociación hacia los empleadores”. El informe no discrepa completamente con la otra investigación.

“Ambos sostenemos que las empresas grandes juegan un papel central en fijar salario (s) y (en que) la creciente desigualdad no debería verse como un fenómeno puramente ‘impulsado por el mercado’”, dice Ken-Hou Lin. Ambas partes coinciden en que algo ha cambiado. En 1950, el economista S. H. Slichter escribió: “Cuando la gerencia puede fácilmente permitirse pagar salarios altos, tiende a hacerlo”. Ese ya no parece ser el caso