La economía estadounidense continúa creciendo lentamente y en algunas regiones se observan síntomas de debilitamiento, indicó ayer la Reserva Federal (Fed, banco central) en su libro beige, referencia de su pauta de política monetaria.
“La actividad económica continuó avanzando a un ritmo moderado, aunque se observa en algunas regiones una actividad inestable o que se debilita”, indicó el informe que se publica cada seis semanas.
La Fed destaca “prudencia” a nivel empresarial e indica que los gastos de los consumidores, motor tradicional de la economía norteamericana, “progresaron ligeramente en la mayoría de las regiones” consideradas del país.
El organismo confirma que la debilidad del mercado de la vivienda sigue siendo uno de los puntos flacos de la economía estadounidense y destaca que las presiones inflacionarias muestran tendencia a disminuir.
“Si no hay noticias, es una buena noticia y dada la situación el libro beige es una (noticia) positiva”, estimó Gregory Daco, economista de IHS Global Insight, para quien este reporte “subrayó el lento ritmo de crecimiento económico, al tiempo que hace hincapié en el hecho de que la prudencia y la incertidumbre frenan el crecimiento”.
Para Daco, la esperada debilidad del crecimiento debería provocar una moderación de la inflación suficiente para justificar “nuevas medidas monetarias de reactivación” por parte del banco central, cuya próxima reunión sobre política monetaria está prevista para el 20 y 21 de septiembre.
Debe hacer más
La Fed debe actuar sin demora y con fuerza para apoyar aún más la economía del país, dijo el miércoles el presidente de su filial de Chicago (noreste), Charles Evans.
“Debemos actuar ahora y con vigor”, dijo Evans, presidente de la filial de la Fed en Chicago.
“En vista de que tenemos muchas dificultades para alcanzar nuestro objetivo para (la creación) de empleo (...) la Fed debería considerar seriamente emprender acciones que flexibilicen considerablemente su política monetaria”, indicó.
