Las reuniones deben organizarse con un propósito, porque el tiempo de los integrantes de la empresa es oro, y podrían estar desempeñando otras tareas en vez de estar asistiendo a estos encuentros.
1. Comunique la reunión con tiempo: Para que todos los invitados puedan acudir.
2. Marque los horarios de entrada y salida de la reunión: Así se utiliza bien el tiempo. Muchas veces las reuniones se alargan demasiado sin conseguir nada.
3. No deben ser una rutina: Debe reunir a los empleados con un objetivo.
4. Seleccione bien los asistentes a la reunión: No debe tener a personas que podrían estar desempeñando otras tareas.
5. Recomiende a los asistentes tomar nota de los temas a tratar en la reunión.
6. Si se trata de una reunión importante: Encargue que al finalizar, alguien se ocupe de redactar los puntos claves que se han tratado y enviar una copia a todos los asistentes.
7. Antes de terminar la reunión, deje un tiempo para que los asistentes hagan sus preguntas.
8. Al finalizar, repase todos los puntos importantes con los reunidos.