San Pedro Sula, Honduras
A través de distintas estaciones experimentales espera la Secretaría de Agricultura y Ganadería (SAG) potenciar la producción de cultivos en el corredor seco del país.
José Benítez, subdirector de agricultura de la SAG, dijo que actualmente están identificando nuevos cultivos que puedan incentivar la parte productiva de las zonas más afectadas por el cambio climático en Honduras.
Recomendación
La SAG recomienda la siembra de sorgo en lugar del maíz, ya que es más tolerante a la sequía en el corredor seco.
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Benítez señaló que un proyecto en el que se está trabajando es en el cultivo de pitahaya, ya que en Estados Unidos hay un mercado altamente potencial para esta fruta, que es tolerante a las sequías y con un aporte nutricional importante.
“Están identificando el material genético adecuado, lo haremos a través de las estaciones experimentales de la SAG, el tema número uno será identificar la variedad indicada, porque se va a producir lo que el mercado quiere”, expresó el subsecretario.
Además de la pitahaya, manifestó que la SAG está trabajando en el proyecto de ajonjolí en la zona sur del país para exportar 2,000 manzanas, aprovechando que es altamente tolerante a la sequía.
“Queremos identificar las rutas que nos indiquen qué cultivos se deben potenciar” agregó Benítez.
Prevención
El próximo 20 de marzo espera la SAG tener las recomendaciones de expertos con relación a las precipitaciones que se darán en las distintas zonas del país.
Según las autoridades de la institución, trabajarán por zonas, ya que cada una tendrá distintas precipitaciones y en base a estas harán las recomendaciones adecuadas.
Reservorios
En cuanto a programas para combatir la sequía, la SAG ya está trabajando en reactivar el programa de cosechas de agua.
El proyecto iniciará en la zona de El Paraíso, ya que es un departamento con poco líquido para la producción agropecuaria, especialmente en Güinope, donde se cultiva la cebolla.
Se espera que los primeros ocho reservorios sean construidos en Güinope, El Paraíso.
La construcción estará a cargo del Batallón de Ingenieros de las Fuerzas Armadas y personal técnico de la SAG, y tendrán una capacidad máxima de 20,000 metros cúbicos por cosecha de agua.
A la fecha el corredor seco cuenta con 400 cosechas de aguas, de las cuales 200 fueron hechas para los abrevaderos de ganado.