San Pedro Sula, Honduras
“Nosotros, los pequeños productores de café, somos los únicos que vivimos de esperanzas”, lamenta Alexis Reyes, cafetalero de la aldea El Naranjito en la cordillera de El Merendón.
Al ser consultado sobre cómo le fue en la cosecha 2017-2018, próxima a cerrar, Reyes explica que ha sido un mal año para los productores en todo Honduras, por los precios bajos del grano aromático en el mercado internacional.
| Producción
Al cierre de la cosecha se espera que lo ejecutado respecto al pronóstico de exportación sea de 91.2%.
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El viernes, el saco de 46 kilos café cerró a 99.70 dólares (L2,394) en la bolsa de Nueva York, cuando exactamente hace un año el precio se encontraba en 140.1 dólares (L3,365).
Reyes ha logrado cosechar, en años anteriores, hasta 703 quintales de grano oro, pero este año solo cosechó 400 quintales debido a que “no hay presupuesto para abonar la tierra”.
El pequeño productor contó que su familia se ha visto obligada a diversificar los cultivos para salir adelante. Esta vez también cosecharon tomates y otras hortalizas que comercializan en los mercados de San Pedro Sula.
“Sabemos que así como se encuentra en estos momentos el café no vamos a salir adelante”, dijo a periodistas de Diario LA PRENSA.
Apoyo
Reyes ve muy difícil que el apoyo financiero recién aprobado por el Congreso Nacional, impulsado por el Poder Ejecutivo y el Instituto Hondureño del Café (Ihcafé), llegue a los pequeños productores.
Iván Fajardo, otro cafetalero de El Merendón, desea que la ayuda pueda verdaderamente llegar a los que la necesitan.
“Aquí todo lo toman como un negocio entre los grandes cafetaleros, ojalá pueda llegar la ayuda” señala.
Fajardo, al igual que Alexis Reyes, tuvo un mal año en el que solo pudo producir 350 quintales de café, afectado también por otro problema que tienen los cafetaleros, las deudas por préstamos.
“Conozco unos 20 productores de café aquí en El Merendón que están llorando por todas las deudas que tienen”, expresa Reyes tras agregar que hay instituciones que dicen que ayudarán a los pequeños cafetaleros, pero que en realidad solo los utilizan para seguir haciendo millonarios a sus dirigentes”.
Comercio
A trece días de que se cierre la cosecha de café 2017-2018, Honduras no logrará superar las cifras de la temporada anterior.
A partir de cifras del Ihacafé, el volumen exportado a la fecha es de 9,175,549 quintales de 46 kilogramos por un valor de 1,114 millones de dólares (L26,758 millones).
Yeny Bustamante, jefa de Comercialización del Ihcafé, dice que el registro de ventas es de 9.5 millones de quintales; no obstante, la proyección de exportación de la presente cosecha es de 9.3 millones de sacos por un valor aproximado de 1,200 millones de dólares (L28,824 millones).
Esas cifras serán menores a las reportadas en la cosecha 2016/2017, que fueron 9,509,895 quintales por 1,327.7 millones de dólares (L31,891 millones). Lo anterior significará 200,000 quintales menos exportados en las últimas dos temporadas.
También es más bajo que la proyección de exportación del Ihcafé para la temporada 2017/2018, que es de 10.2 millones de quintales, equivalente a 900,000 quintales menos.
En la cosecha pasada, el precio promedio por quintal fue de 139.61 dólares (L3,353). Hasta ayer, el precio en la temporada vigente es de 121.41 dólares (L2,916). Lo anterior significa una caída de 18.20 dólares (L437) por quintal o 13.03 puntos en valores porcentuales.
Bustamante reconoce que los bajos precios han tenido un fuerte impacto mundial en la caficultura. Subraya que varios países han tomado acciones para protestar por la caída de los precios.
Las organizaciones que aglutinan a los productores de café en Honduras han externado su preocupación porque ante los bajos precios internacionales el cultivo de ese grano aromático no resulta rentable. El Gobierno ha aprobado mecanismos de financiamiento a través de la administradora de fondos de garantía recíproca Confianza y la banca privada que suman más de L6,700 millones.
