El domingo pasado se disputó el primer enfrentamiento de la gran final. ¿Qué nos dejó este encuentro? En lo que respecta a lo táctico, una clara demostración de Keosseián de que las finales se ganan y que el juego adornado está para otros partidos.
No cambió el esquema, siempre con cuatro hombres en el fondo, aunque en esta ocasión el lateral derecho fue Acevedo, con muy poca proyección, pero con disciplina táctica estupenda.
La variante más destacada fue la de poblar la mediacancha con cinco volantes de gran movilidad, claridad técnica y velocidad en definición. En punta, Tyson, aunque la verdad era más otro enganche que delantero.
El España, fiel a su estilo y sin sorpresas, para qué si le ha ido bárbaro en todo el campeonato, ¿verdad? Cuatro en el fondo, cuatro volantes y dos puntas. Al observar los planteamientos tácticos de ambos entrenadores, ¿dónde estuvo la fórmula para que el primer choque quede en manos de Marathón?
Sencillamente el profe Keosseián capitalizó cada uno de sus avances y neutralizó toda posibilidad de riesgo en su portería. Eclipsó a Mario Rodríguez con Acevedo, el 'Pescado' Bonilla no dejó crear una sola habilitación de Carlinho, lo que provocó una falta de asistencia a sus tan temidos delanteros, Pavón y Everaldo.
Eso fue en el plano defensivo. Ahora bien, ¿qué buscó el Monstruo? Lógicamente, lo primero era controlar el balón, poseerlo y distribuirlo correctamente.
En segundo lugar, tratar de salir en bloque y velozmente para que sus futbolistas tuvieran superioridad numérica en campo adversario. Y la tercera y a mi juicio la más importante: aprovechar el talento de sus jugadores.
Pudieron aparecer Chávez, Tyson, Berríos, por nombrar algunos, pero como también era de esperarse, el más desequilibrante de todos ellos en el mano a mano es sin duda Carlos Will Mejía.
Para muchos, individualista, para otros, poco táctico, para mí, un talentoso de esos que paralizan al público. En el gol fue determinante su creatividad, velocidad mental y una pegada exquisita. ¡Golazo! Para enmarcarlo.
¿Qué pasará ahora en el compromiso del sábado? Si algo ha caracterizado al conjunto catedrático es su fortaleza mental. En semifinales cambió en tres ocasiones el marcador ante Olimpia. Su juego en el Morazán crece muchísimo.
¿Podrá superar la posible falta de Carlos Pavón? Es otro punto a considerar. Les faltará su líder, su emblema, su técnico dentro del campo de juego.
La mesa está servida. Existe leve ventaja para el elenco verde. Su entrenador es de los que mueven muy bien sus piezas y prácticamente lee a la perfección a sus adversarios.
Mario Zanabria, otro gran estratega, deberá encontrarle la vuelta a un partido que de por sí es complicado. Se enfrenta el mejor del torneo, Real España, al mejor de la Concacaf, Marathón.
