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Iker Casillas y Sara Carbonero han aprovechado para hacer una escapadita a la playa del Algarve, Portugal, junto a su hijo Martín. Y su orgulloso papá no ha dudado en compartir “Su primera vez” en la playa con todos nosotros mediante su cuenta de Instagram.
Todo iba bien hasta que un aficionado escribió un desagradable comentario en una tierna imagen que publicó el portero en la que Sara, luciendo cuerpazo en bikini y con sombrero, levantaba a Martín en la orilla de la playa.
'Tíralo pal agua haber si flota topó!', escribía @dany_81, un comentario que no hizo ninguna gracia a Casillas, que perdió los nervios y le contestó entre insultos.
'Tienes que ser un hijo de la gran puta para poner ese comentario... espero que tengas la vergüenza de pensar 3 minutos lo que has puesto... GILIPOLLAS', le respondió Iker. Y es que el portero por los suyos... ¡Saca uñas y dientes!
La tierna imagen de la presentadora, una de las tantas que cuelgan habitualmente tanto ella como el deportista en sus redes iba a ser una inocente postal veraniega pero ha planteado el debate eterno sobre la privacidad en las redes.
Algunos internaturas defienden el derecho a comentar libremente -aunque sea en sentido negativo- las imágenes expuestas por los personajes públicos de su vida privada entendiendo que si lo hacen de forma abierta al público ya asumen ese riesgo. Otros, y por tratarse en este caso de un bebé, creen que este tipo de comentarios son de mal gusto y por lo tanto censurables aunque se trate de una imagen libremente compartida por sus propietarios.
Casillas enfurecido
pic.twitter.com/KW0uQ4JN01 — Barquín (@barq_in) julio 2, 2014
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