La Concacaf presentó este miércoles el torneo Liga de Naciones, el cual estará estructurado por 40 selecciones nacionales. Se conformará por tres ligas: A, B y C. La Liga A es la principal agrupación.
Cuatro grupos de tres conjuntos integrarán el máximo circuito, adonde los líderes de cada sector se enfrentarán por el título; por otra parte, los sotaneros de cada parcela se relegarán a la Liga B.
La segunda zona tendrá cuatro grupos de cuatro miembros cada uno; al igual que en la primera, en la Liga B perderán la categoría los peores de cada grupo, mientras que los ganadores ascenderán a la Liga A.
Por último, el resto de los países constituirán a la Liga C, la misma que se dividirá en cuatro grupos, de los cuales el triunfador de cada uno subirá a la Liga B.
De esta zona, el grupo A está integrado por Jamaica, Canadá, Haití, El Salvador, Martinica, Cuba, Guayana Francesa y Guadalupe.
El grupo B tiene a Nicaragua, San Cristóbal y Nieves, Curacao, Surinam, Antigua y Barbuda, República Dominicana, Bermuda, Guyana y Belice.
En el C están Bonaire, Granada, San Vicente y las Granadinas, Santa Lucía, Barbados, Puerto Rico, Bahamas, Dominica y Aruba.
Islas Caimán, Turcas y Caicos, Montserrat, Islas Vírgenes Estadounidenses, San Martín, Sint Maarten, Anguila e Islas Vírgenes Británicas integran el D.
Para decidir en qué nivel estarán los combinados nacionales, se disputará una fase de clasificación de septiembre de 2018 a marzo de 2019.
No obstante, Trinidad y Tobago, Costa Rica, Honduras, México, Panamá y Estados Unidos avanzan directamente a la Liga A, debido a que participaron en la hexagonal final rumbo a Rusia 2018.
Los primeros seis puestos del clasificatorio se unirán al primer nivel, los siguientes 16 al segundo, y el resto al tercero.
Este evento hace desaparecer la Copa Uncaf y Copa del Caribe, que solo servían para clasificar a Copa Oro. La justa contará con incentivos deportivos, como boletos para Copa Oro y el sistema preclasificatorio rumbo al Mundial Qatar 2022.