“Dio su vida para salvarme”: jueza llora muerte de su esposo a manos de comando armado

El pasado domingo en Río de Janeiro, Brasil, el policía João Pedro fue asesinado durante un asalto mientras se dirigía a casa junto a su esposa, la jueza Tula Mello.

Fotografías: Fantástico (Globo Brasil)

Ambos regresaban por separado en sus vehículos después de visitar a la madre de João Pedro y recoger un coche que estaba en reparación. La jueza logró escapar ilesa del ataque.

Según el relato de Tula Mello, conducía justo detrás del automóvil de su esposo cuando notó que él reducía la velocidad. Al observar a hombres armados al otro lado de la calle, decidió dar marcha atrás para huir del lugar.

En ese momento, los delincuentes comenzaron a disparar contra su coche, que aunque era blindado, no resistiría por mucho tiempo el impacto de armas largas.

João Pedro salió de su coche en medio del tiroteo y recibió cinco disparos, muriendo en el lugar. De acuerdo con su esposa, el agente no reaccionó con violencia, sino que actuó con el objetivo de distraer a los atacantes y protegerla.

“Dio su vida por salvarme”, declaró la jueza al canal Globo, al día siguiente del ataque.

Tula destacó que logró escapar gracias a un entrenamiento en defensa que recibió del Tribunal de Justicia y a los consejos de conducción defensiva que su esposo le había enseñado.

“Me entrenó para que pudiera utilizar estos mecanismos en la práctica”, dijo. Su vehículo recibió cinco impactos de bala, uno de ellos en el parabrisas frente a ella.

La Policía Civil de Río de Janeiro informó que los responsables del ataque pertenecen al grupo criminal Comando Vermelho.

Según la investigación, los delincuentes buscaban un nuevo vehículo tras haber dañado gravemente el que usaban durante un enfrentamiento reciente en Campo Grande, una comunidad controlada por la milicia, también en la zona oeste de la ciudad.

Hasta el momento, no se ha reportado ninguna detención relacionada con el caso. Las autoridades continúan con las investigaciones para dar con los responsables del crimen, que ha generado indignación en distintos sectores sociales y judiciales de la ciudad.

La jueza expresó su rechazo ante la creciente violencia que afecta a la población. “¿Es que nadie ve lo que está pasando? La violencia se ha vuelto algo común y no se hace nada”, afirmó.

También declaró que no se quedará de brazos cruzados y que hará lo necesario para que se aplique la ley y se garantice la seguridad en la ciudad.