Los vibrantes colores neón vivieron su punto álgido de popularidad en la década de los 80, se convirtieron en los mejores aliados para demostrar su rebeldía los adolescentes de la época.
Los varones, por ejemplo, comenzaron a vestir ropa de vinil, jeans holgados y en los últimos años se atrevieron a usar conjuntos de nailon en alegres colores neón. Las mujeres fueron las primeras en caer rendidas a estos divertidos matices, precisamente por eso, una prenda neón bastaba para realzar cualquier outfit.
Fue así como los zapatos de punta, bolsos de nailon y aritos se sumaron al guardarropa.
Para los jóvenes de este milenio, la explosión visual de estos colores, presentes en propuestas de temporada de reconocidos diseñadores, es una divertida oportunidad de personalizar esta moda retro.
La trilogía de los marcadores fluorescentes, amarillo, rosa y naranja, son los protagonistas modernos. Aunque también vemos el verde limón muy bien utilizado en las colecciones de verano de Louis Vuitton, Prada, Michael Kors y hasta Versace.
En otros países donde las estaciones del año son bien marcadas disfrutan de esta popular moda en primavera y verano.
La paleta de color, por ejemplo, no solo se limita a los colores neón tradicionales, se atreven a explorar la intensidad de otros colores como el azul, púrpura y verde.
Para lucir esta tendencia de una manera funcional, aconsejamos usar piezas básicas como camisetas, suéteres o blazers. La manera tradicional de usarlos es en looks completos, cero estampados. Una camiseta o un blazer como único punto focal en el outfit es más que suficiente.
Jeremy Scott nos demuestra que el estampado militar y tonos flúor se llevan bien, así como en bloques de color con print floral a lo Versace.
Si es de personalidad más discreta, puede usar accesorios como aritos, pulseras, calzado (desde sandalias hasta sneakers), carteras en lúrex o vinil.
Los varones, por ejemplo, comenzaron a vestir ropa de vinil, jeans holgados y en los últimos años se atrevieron a usar conjuntos de nailon en alegres colores neón. Las mujeres fueron las primeras en caer rendidas a estos divertidos matices, precisamente por eso, una prenda neón bastaba para realzar cualquier outfit.
Fue así como los zapatos de punta, bolsos de nailon y aritos se sumaron al guardarropa.
Para los jóvenes de este milenio, la explosión visual de estos colores, presentes en propuestas de temporada de reconocidos diseñadores, es una divertida oportunidad de personalizar esta moda retro.
La trilogía de los marcadores fluorescentes, amarillo, rosa y naranja, son los protagonistas modernos. Aunque también vemos el verde limón muy bien utilizado en las colecciones de verano de Louis Vuitton, Prada, Michael Kors y hasta Versace.
En otros países donde las estaciones del año son bien marcadas disfrutan de esta popular moda en primavera y verano.
La paleta de color, por ejemplo, no solo se limita a los colores neón tradicionales, se atreven a explorar la intensidad de otros colores como el azul, púrpura y verde.
Para lucir esta tendencia de una manera funcional, aconsejamos usar piezas básicas como camisetas, suéteres o blazers. La manera tradicional de usarlos es en looks completos, cero estampados. Una camiseta o un blazer como único punto focal en el outfit es más que suficiente.
Jeremy Scott nos demuestra que el estampado militar y tonos flúor se llevan bien, así como en bloques de color con print floral a lo Versace.
Si es de personalidad más discreta, puede usar accesorios como aritos, pulseras, calzado (desde sandalias hasta sneakers), carteras en lúrex o vinil.
 Versace
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 Giorgio Armani
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