Errores de maquillaje que todos deben evitar

Es momento de que dejes de aplicar mucha base, blush o, peor, no exfoliarte la piel cada semana. Repasamos los errores más comunes al maquillarse para aprender a no cometerlos nunca más.

  • 03 ene 2020

La función principal del maquillaje es resaltar los rasgos para embellecer. En ocasiones, técnicas extendidas hacen que los resultados sean justo los contrarios. Estos son algunos de los errores más comunes en maquillaje que es conveniente evitar, según maquilladores profesionales.

Maquillar no es tapar. “Tenemos la mala educación de creer que llevar base de maquillaje es ir tapada”, explica a Efe Silvia Pellissa, maquilladora y jefa de producto de NYX Cosmetics, sobre esta creencia tan común, sin tener en cuenta la verdadera función del producto: “unificar, mejorar la piel y aportar el beneficio que deseemos en función de la necesidad de cada piel y el acabado que se desea lograr”, detalla.

Mejor cubrir bien imperfecciones y conseguir una piel uniforme, sin saturarla de producto, logrando cuidar y respetar la piel, además de proporcionar un mejor aspecto.

Menos es más, ¡también en el maquillaje! No es necesario poseer un neceser digno de maquillador profesional ni aplicar religiosamente una larga lista de productos para elaborar un maquillaje bonito, mejor optar por los productos que más se adaptan a tus necesidades.
“Piensa bien cuánto tiempo quieres dedicar al maquillaje, ¿qué imagen quieres conseguir? Sobre esto, elige tus productos, menos es más”, detalle Pellissa.

La piel es el lienzo, cuídalo. Pilar Vilas, maquilladora asidua en producciones de moda, destaca la importancia de tener en cuenta las texturas de la piel antes de proceder a aplicar productos: “es conveniente no aplicar base de maquillaje sobre los párpados, la piel es muy fina y no soporta mucha cantidad de productos, por lo que creará pliegues”, explica sobre un ritual adquirido y realizado casi de forma inconsciente en el que la base se aplica en grandes cantidades a conciencia sobre todo el rostro.

Las cejas en el punto de mira. Es cierto que llevar las cejas maquilladas cambia la mirada, pero opta por escoger “el mismo tono que el cabello” para así asegurar un resultado natural que no atraiga toda la atención sobre este punto, explica Pellissa.
Por su parte, Vilas recomienda “no maquillar el inicio”, esto a fin de no cambiar la expresión de la persona.

El antiojeras, mejor poca cantidad y ¡fuera los tonos claros! El antiojeras “no se aplica de forma circular por el párpado y la ojera”, señala, apuntando que la mejor opción es “aplicarlo en el surco, justo donde se hunde la piel”. De esta forma, se evita cubrir la zona del pliegue posterior a las pestañas, sin remarcar el doblez y las posibles líneas de expresión.

Fuera de la costumbre popular de emplear un tono más claro que la base para cubrir ojeras, Vilas señala que la forma de cubrir las ojeras de forma eficiente es “usando un corrector del mismo tono que la base para neutralizarlo y evitar que se vea gris debido al contraste entre piel y tonalidad clara”, un principio que, según asegura, es aplicable a la hora de camuflar las bolsas.

“Un error muy común para corregir las bolsas es poner un color más claro que el de la base, algo que solo consigue evidenciarlas más”.

Ojo a los polvos matificantes. Antes de proceder a la aplicación de los polvos es conveniente observar las texturas de la piel, ya que si se aplican “sobre granitos o en partes donde es más rugosa, como la nariz”, el efecto conseguido será hacer más notables estas imperfecciones.

Guía de uso del iluminador. Tal y como cuenta Vilas, se debe prescindir del iluminador “en la zona central del rostro para aplicarlo en los puntos de luz”, una parte donde es más fácil encontrar poros dilatados, que se ven resaltados si se aplica el producto.

¿La alternativa? Mezclarlo con la hidratante o la base de maquillaje para conseguir así “un acabado natural con un brillo saludable”, explica Vilas.