Los Ángeles, Estados Unidos.
La oscarizada Julianne Moore rechaza con rotundidad la idea de que un matrimonio exitoso tiene que verse siempre caracterizado por la gran dedicación que les lleva a las dos partes mantenerlo a flote, ya que a su juicio el amor nunca debería entenderse como un trabajo sino como un aspecto de la vida humana que genera “felicidad y placer”.
“Odio tener que decir que un matrimonio acarrea mucho esfuerzo y que hay que trabajar todos los días para conservarlo, porque me parece que el amor debería asociarse siempre al placer y a la felicidad que nos brinda. Es verdad que una relación hay que cultivarla a diario, pero me parece algo miserable que haya gente que solo la entienda como una mera responsabilidad”, confesó al diario Daily Mail.
Plena
Se podría decir que la artista estadounidense es toda una privilegiada en este sentido, ya que ella no tiene más que elogios y alabanzas a la hora de describir al hombre que ocupa su corazón, Bart Freundlich, con quien mantiene un sólido matrimonio desde el año 2003.
“Es un hombre muy divertido, que me hace reír en todo momento. El otro día iba de camino a una reunión de trabajo y me envió un mensaje de texto cuando estaba a punto de llegar. Me reí tanto que tuve que parar un momento a recobrar el aire antes de entrar por la puerta”, reveló la extrovertida intérprete.
La oscarizada Julianne Moore rechaza con rotundidad la idea de que un matrimonio exitoso tiene que verse siempre caracterizado por la gran dedicación que les lleva a las dos partes mantenerlo a flote, ya que a su juicio el amor nunca debería entenderse como un trabajo sino como un aspecto de la vida humana que genera “felicidad y placer”.
“Odio tener que decir que un matrimonio acarrea mucho esfuerzo y que hay que trabajar todos los días para conservarlo, porque me parece que el amor debería asociarse siempre al placer y a la felicidad que nos brinda. Es verdad que una relación hay que cultivarla a diario, pero me parece algo miserable que haya gente que solo la entienda como una mera responsabilidad”, confesó al diario Daily Mail.
Plena
Se podría decir que la artista estadounidense es toda una privilegiada en este sentido, ya que ella no tiene más que elogios y alabanzas a la hora de describir al hombre que ocupa su corazón, Bart Freundlich, con quien mantiene un sólido matrimonio desde el año 2003.
“Es un hombre muy divertido, que me hace reír en todo momento. El otro día iba de camino a una reunión de trabajo y me envió un mensaje de texto cuando estaba a punto de llegar. Me reí tanto que tuve que parar un momento a recobrar el aire antes de entrar por la puerta”, reveló la extrovertida intérprete.
