Madrid, España.
La modelo rusa Irina Shayk describió su belleza como algo interior y no como todos la conocen en el mundo de las pasarelas. En una entrevista que dio a El País, Irina Shayk aseguró que ella no es la belleza que todos pintan.
“Desde luego no me veo así. La gente que me conoce y me rodea tampoco lo hace. Los míos valoran mi carácter y mi carisma: ahí está la belleza”.
Luchadoras
Shayk confesó que se burlaban de ella por su tez oscura heredada de su padre y que en un principio le desagradaba acompañar a su hermana a una agencia de modelos.
La modelo y actriz defendió sus raíces y el lugar donde se crió, rodeada de mujeres.
“Me crié entre mujeres fuertes. Mi abuela luchó en la II Guerra Mundial. Mi madre era una profesora de música que se quedó viuda, y mi hermana. Eramos una familia de mujeres y a ninguna se nos doblegaba. Eso me ha ayudado en la vida”, señaló.
En aquella adolescencia, cuando falleció su padre minero, recuerda a su madre pluriempleándose y a ella y su hermana pintando en un hospital y ayudando en el huerto familiar (Irina tiene una adicción: los tomates; los mete hasta en las maletas).
Irina es la nieta de Galina Shaykhlislamova, una agente de la inteligencia militar de Stalin en Rusia.
Privilegio
La modelo, nacida como Irina Valérievna Shaijlislámova y conocida como Irina Shayk, está considerada una de las criaturas más bellas del planeta.
Cuenta con un patrimonio económico estimado en nueve millones de dólares.
Tuvo un romance con el futbolista del Real Madrid Cristiano Ronaldo y hasta el momento se relaciona sentimentalmente con el actor de Hollywood Bradley Cooper .
Contenta
Durante su visita a España, Irina no dudó en confesar a los medios de comunicación que le encanta y está muy feliz de estar viviendo uno de los mejores momentos de su vida. Además, confesó que España le trae siempre muy buenos recuerdos porque fue el primer país en el que le pagaron por trabajar como modelo.
La maniquí fue la gran protagonista en la fiesta “Ginger Ale by Schweppes” que se ha celebrado en la embajada italiana en Madrid.
La modelo rusa Irina Shayk describió su belleza como algo interior y no como todos la conocen en el mundo de las pasarelas. En una entrevista que dio a El País, Irina Shayk aseguró que ella no es la belleza que todos pintan.
“Desde luego no me veo así. La gente que me conoce y me rodea tampoco lo hace. Los míos valoran mi carácter y mi carisma: ahí está la belleza”.
Luchadoras
Shayk confesó que se burlaban de ella por su tez oscura heredada de su padre y que en un principio le desagradaba acompañar a su hermana a una agencia de modelos.
La modelo y actriz defendió sus raíces y el lugar donde se crió, rodeada de mujeres.
“Me crié entre mujeres fuertes. Mi abuela luchó en la II Guerra Mundial. Mi madre era una profesora de música que se quedó viuda, y mi hermana. Eramos una familia de mujeres y a ninguna se nos doblegaba. Eso me ha ayudado en la vida”, señaló.
En aquella adolescencia, cuando falleció su padre minero, recuerda a su madre pluriempleándose y a ella y su hermana pintando en un hospital y ayudando en el huerto familiar (Irina tiene una adicción: los tomates; los mete hasta en las maletas).
Irina es la nieta de Galina Shaykhlislamova, una agente de la inteligencia militar de Stalin en Rusia.
Privilegio
La modelo, nacida como Irina Valérievna Shaijlislámova y conocida como Irina Shayk, está considerada una de las criaturas más bellas del planeta.
Cuenta con un patrimonio económico estimado en nueve millones de dólares.
Tuvo un romance con el futbolista del Real Madrid Cristiano Ronaldo y hasta el momento se relaciona sentimentalmente con el actor de Hollywood Bradley Cooper .
Contenta
Durante su visita a España, Irina no dudó en confesar a los medios de comunicación que le encanta y está muy feliz de estar viviendo uno de los mejores momentos de su vida. Además, confesó que España le trae siempre muy buenos recuerdos porque fue el primer país en el que le pagaron por trabajar como modelo.
La maniquí fue la gran protagonista en la fiesta “Ginger Ale by Schweppes” que se ha celebrado en la embajada italiana en Madrid.
