De Diane Keaton se puede decir que es actriz, escritora, directora y ganadora del Óscar; sin embargo, no es un modelo a seguir.
“Siento que soy una mujer ordinaria, pero la vida es extraordinaria”, dice la actriz, hablando por teléfono desde un hotel de Nueva York. “Todos nosotros tenemos una historia para contar. Yo tengo mis historias, usted tiene sus historias. No siento ninguna diferencia entre usted y yo, excepto por la cuestión de la actuación. “Por lo demás, yo solo soy,” insiste. “No hay nada particularmente maravilloso en mí. Simplemente soy como todos los demás”.
Argumento
Keaton habló de su nueva película, 5 flights up, basada en una novela de Jill Ciment. La cinta presenta a Keaton y Morgan Freeman como Ruth y Alex, una pareja casada por mucho tiempo que vive en un hermoso apartamento con entrada independiente cuya única desventaja son todas esas escaleras. Temiendo que los problemas se compliquen a su edad y sabiendo que el barrio, otrora venido a menos y descuidado, ahora es elegante y el precio de los inmuebles se ha disparado, deciden poner en venta su amado hogar. ¿Pero realmente están dispuestos a cambiar o simplemente se están precipitando, sacrificando su felicidad actual por una suposición?
“Me encantó esta historia sobre una mujer en un matrimonio ordinario, lo cual es extraordinario para mí, que nunca ha estado casada”, afirma Keaton, quien ha tenido relaciones muy conspicuas con Woody Allen, Warren Beatty y Al Pacino.
“La parte más maravillosa de la vida de Ruth es el hombre al que escogió para contraer matrimonio. “Repito, nunca me he casado, así que imagine lo que significó para mí interpretar eso. Sí, llegué a pensar que había perdido muchas oportunidades en la vida”, admite. “No sé cuál haya sido mi problema, pero no me casé. ¡Ahora ya no tengo esperanza!”.
 Diane Keaton.
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En entrevista por separado, el director Richard Loncraine afirmó que Keaton y Freeman hicieron muy buena pareja. “A ninguno de los dos les gusta ensayar,” afirmó. “Tienen una experiencia de toda la vida que los apoya. Entre una toma y otra, a los dos les gusta cantar, así que se ponían a cantar viejos éxitos de Hollywood.
Repasábamos algunas canciones en el sofá mientras arreglaban la iluminación”. “Para mí, Morgan Freeman es el hombre que relata las historias de la vida,” afirma la actriz. “Es un hombre decente. Es el hombre que admiramos en The Shawshank Redemption (1994). Es el hombre al que acudimos para creer en la bondad común del género humano. “Además, es hermoso,” agrega. “¡Ese espléndido rostro!”.
Experiencia
Al ir envejeciendo, las películas de Keaton hablan cada vez más de la edad y de la mortalidad. 5 flights up no es la excepción.
“Considero el envejecimiento desde el concepto de que la vida no deja de evolucionar y cambiar”, afirma Keaton. “Así también cambia nuestra relación con la edad avanzada. Envejecer definitivamente es algo que trato de abordar con un mínimo de decoro.
“Lo difícil es que ahora pienso más en las pérdidas que en el pasado,” continúa. “La pérdida es algo que predomina en mi mente. Ahora pienso más en perder a mis padres que cuando realmente los perdí.
Trayectoria
Después de estudiar teatro en el Colegio Santa Ana de California, Keaton se fue a vivir a Nueva York a estudiar actuación en el Neighborhood Playhouse.
Su primer papel importante en el teatro fue en Broadway en Hair (1968), siendo seleccionada en 1969 para actuar en la obra de teatro de Woody Allen, Play it again, sam. Recrearía ese papel en 1972 para la versión cinematográfica, la primera de las ocho películas que hizo con Allen.
Pocas actrices han aparecido en tantas películas que se han vuelto clásicas como Keaton ni lo han hecho en el curso de una carrera tan larga. En su filmografía encontramos The Godfather (1972), The Godfather: Part II (1974), Reds (1981), The first wives club (1996), entre otras.
Ha obtenido cuatro nominaciones al Óscar por Annie Hall (ganó como mejor actriz), Reds, Marvin’s Room y Something’s Gotta Give.
