México.
Aunque tenía preparado un ruedo por si optaba por montar a caballo, un Joan Sebastian visiblemente cansado y un poco inflamado demostró que el cáncer que padece no merma su voz, que aún puede presumir en esta gira de despedida del jaripeo La Última Maroma.
Por problemas de salud, el cantautor ya no montó a caballo. En la presentación que realizó la noche del sábado en el Honda Center, en Anaheim, optó por quedarse sentado la mayor parte de la hora que duró su concierto, levantándose de vez en cuando para caminar de un lado a otro del escenario.
“Le doy gracias al Creador porque me había dado un año de vida, y ya llevo 15. Antes engañaba a los doctores, pero ya no me puedo engañar yo mismo”, expresó el cantante, quien fue ovacionado en varias ocasiones.
Al final de la presentación, ofreció una entrevista y dijo que sigue luchando contra el cáncer.
“Estoy bien, sigo luchando contra el cáncer”, expresó. “Y estoy preparado para seguir luchando ante lo que sea por amor a la vida”.
Durante su actuación, Joan recibió varias muestras de cariño del público, que aunque esperaba que saliera a ofrecer el show de jaripeo, respetó que no lo llevara a cabo.
En junio tuvo un pequeño desequilibrio al bajar de un caballo en la Plaza de Toros Nuevo Progreso, y a principios de agosto sufrió un mareo durante la presentación que hizo para festejar a los telefonistas en la Ciudad de México.
Pero el cantante también dejó aflorar su temperamento al responder a varios reporteros que le preguntaron por qué no salió cantando a caballo.
“Fue una maravillosa noche. La gente no me estaba esperando a caballo, la gente está informada que no puedo montar a caballo”, manifestó.
