San Pedro Sula, Honduras
Los cineastas hondureños Elizabeth Figueroa, Nolban Medrano, René y Camilo Pauck, presentaron este miércoles en Tegucigalpa el cortometraje 'Solo Sebastián', que trata sobre la violencia en el país centroamericano, pero ambientada en el año 2020.
'Es un cortometraje que habla acerca de la incertidumbre que vive la sociedad actual con respecto a los temas de violencia enfocado en el año 2020. Quisimos ponerlo en un futuro muy próximo aunque algunos creen que ya se está viviendo eso', dijo Efe Elizabeth Figueroa, productora de Latino Estudio.
El trabajo fue realizado en conjunto por Latino Estudio, cuyos productores son Figueroa y Medrano, y Reck Producciones, a cargo del cineasta francés René Pauck y su hijo Camilo, hondureño.
La producción se desarrolla en una región que puede ser Honduras o cualquier parte del mundo donde la violencia ha llegado a índices altos y trata sobre la incertidumbre que vive la población para saber qué hacer para combatir la situación que está viviendo, añadió Figueroa.
Medrano, por su parte, dijo que 'Solo Sebastián' es un cortometraje 'que pretende hacer una reflexión alrededor del tema de la seguridad y la violencia'.
'Solo Sebastián' es una historia sencilla sobre un posible futuro, donde como en un espejo podemos vernos reflejados en un ambiente de incertidumbre provocado por la descomposición social que vivimos en nuestros días', acotó el cineasta.
Sobre el rodaje
Además, en el cortometraje se plantea la psicología del hombre y la mujer que se sienten incapaces de cambiar el medio violento en el que viven, y renunciando a las comodidades urbanas deciden aislarse para proteger sus identidades.
El rodaje de la producción llevó dos días y otros quince en postproducción, indicó Medrano durante la presentación en el Centro Cultural de España en Tegucigalpa, cuyo director, Álvaro Ortega, resaltó el trabajo de los cineastas hondureños.
La propuesta temática del cortometraje 'Solo Sebastián' se inspira en la incapacidad ciudadana que vive en Honduras ante la ola de violencia desatada en los últimos años, según sus productores, que llevan varios años en el oficio.
La producción trata sobre tres personajes que viven aislados sobreviviendo en una casa abandonada en la montaña, donde reciben la visita de Sebastián, un hombre que llega huyendo de la ciudad por la anarquía que se vive en esos días.
'Hay saqueos, no hay electricidad, no hay agua, es una ciudad en total descomposición económica y social, donde los hombres armados están por todos lados', explica Sebastián a los tres aislados que le reciben en la casa y le dan posada.
Los personajes son interpretados por Mario Mejía (Sebastián), Silvia Stefanía (Leticia), Emmanuel Jaén (Rolando, el profesor), Mauricio Mendoza (Milo) y un chico que huye de la violencia interpretado por Diego Mendoza.
La producción se planteó para ser narrada de manera sencilla, con tomas abiertas y sin mayor movimiento, donde el protagonismo de los personajes conduce la historia y todos los elementos técnicos y artísticos giran al servicio de la actuación.
La música estuvo a cargo de Alfredo Corrales, con un arreglo nostálgico y muy agradable que contrasta a perfección con el tema violento que se plantea en la película.
El guión y la dirección del cortometraje estuvieron a cargo de Elizabeth Figueroa, mientras que la producción fue de Nolbnam Medrano y Camilo Pauck.
