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Carlos Vargas y Brandon Coleman, unidos por su amor al jazz

  • 27 abril 2017 /

Además de brindar dos recitales, los artistas participaron en un taller de música en la Universidad Nacional Autónoma de Honduras.

    San Pedro Sula, Honduras.

    Al músico hondureño Carlos Vargas y al estadounidense Brandon Coleman los une algo más que una gran amistad: su pasión por la guitarra y el jazz.

    Los artistas, radicados en la ciudad de Cincinnati en Ohio, Estados Unidos, visitaron San Pedro Sula para brindar dos conciertos, uno en La Madrugada Hostel y otro en la Escuela de Aplicación musical. Asismismo, impartieron un taller sobre jazz en la Universidad Nacional Autónoma de Honduras en el Valle de Sula (Unah-vs).

    Dúo
    Carlos y Brandon se reúnen para tocar una vez por semana en diferentes lugares de Cincinnati, EUA.

    Los jóvenes guitarristas conversaron con LA PRENSA acerca de sus inspiraciones, sus sueños y su experiencia juntos.

    Para Coleman, quien tiene sus propios grupos: Brandon Coleman Cuarteto y Trío, el estar por primera vez en Honduras es una experiencia especial, pues para él es impresionante ver a la gente disfrutar la música en vivo. El norteamericano habló también acerca de su fuerte conexión con el artista originario de Tegucigalpa.

    “Tocar con Carlos es un honor, ya que a pesar de que tocamos desde hace cinco meses, con él siento que he tocado toda la vida. Existe entre nosotros una química que hace que siempre estemos de acuerdo en lo que hacemos”, manifestó.

    Brandon Coleman y Carlos Vargas tocaron en La Madrugada Hostel. El artista Javier Sánchez pintó durante el recital.
    Apasionados

    Carlos y Brandon sienten una enorme atracción por el jazz, ambos coinciden en que es un género que les permite la libertad de expandirse y experimentar.

    Sin embargo, el artista hondureño de 33 años confiesa que no siempre se inclinó por este género.

    “Yo empecé tocando la guitarra clásica, pero la rigidez de este tipo de música lejos de atraparme me llevó a otro espacio en el que yo pudiera hacer lo que deseara, y fue así como encontré el jazz”, explicó Vargas, quien realizó sus estudios musicales en el Cincinnati College Conservatory of Music.

    Para los artistas, la inspiración es un factor clave a la hora de hacer sus propias composiciones, y es por ello que dedican mucho tiempo a la música. “Para mí las mejores horas para componer música es bien temprano en la mañana, porque en ese momento no está la interrupción del teléfono o el televisor”, indicó Coleman.

    Vargas, en cambio, se aferra a sus experiencias personales al momento de buscar su inspiración. “Yo piendo mucho en mis memorias, las experiencias con mi familia, en mi país y también ahora con mis hijos. A veces llega y otras veces no”, aseveró.

    Una de las misiones de Vargas y Coleman es transmitir esa pasión que sienten por la música a las nuevas generaciones de artistas. “Es mejor desarrollar tu propio arte que tratar de cambiar tu estilo por complacer a las mayorías”, aconsejó Brandon a los jóvenes que quieren abrirse camino en la música.

    Carlos, por su parte, dijo que se debe tener “consistencia y disciplina”. “La vida se trata de tener cinco por ciento de talento y 95 por ciento de consistencia y disciplina. Todos los días hay que pulir nuestro talento”, concluyó.