Hace algunos meses las revistas de prensa rosa de Francia revelaban que el príncipe heredero al Ducado de Luxemburgo estaba enamorado y que podría comprometerse con una aristócrata belga.
En ese momento nadie de la familia real luxemburguesa lo confirmó pero tuvo que pasar cerca de cinco meses para que esos rumores fueran ciertos y es así como Guillermo de Luxemburgo y la condesa Stéphanie de Lannoy han sorprendido a sus allegados con anuncio de boda.
El último heredero soltero de Europa y su rubia prometida se casarán el sábado 20 de octubre, tras anunciarlo en un escueto comunicado. El viernes anterior, la pareja celebró oficialmente su compromiso en el palacio del Gran Ducado.
Alrededor de cuarenta personas asistieron a la recepción real por el compromiso, un acto “íntimo”. La familia celebró el compromiso después de haber recibido el visto bueno del parlamento luxemburgués.
El primer ministro luxemburgués, Jean-Claude Juncker, compareció en sesión extraordinaria de la cámara de los diputados para anunciar el compromiso de Guillermo (30) y Stéphanie (28) .
Curiosidad
Aún no se ha confirmado el lugar donde se celebrará la ceremonia, aunque todo apunta que será en la Catedral de Santa María del Gran Ducado, donde Enrique y María Teresa de Luxemburgo contrajeron matrimonio en 1981.
De lo que hay constancia es que al tratarse de la última boda real de un heredero al trono hasta dentro de varias décadas será un acontecimiento de trascendencia mundial en el que se tendrá la oportunidad de volver a ver de boda a la realeza.
La pareja dispondrá de seis meses para preparar el día más feliz de sus vidas. Medio año para poner el final de cuento a su relación.
Guillermo ha tenido siempre contacto con la aristocracia belga al ser nieto de la gran duquesa Josefina Carlota, hermana ya fallecida del actual rey Alberto de los belgas, y el flechazo pudo producirse hace cinco años en un baile, aunque su relación se intensificó en los tres últimos años, a lo largo de los cuales, según varios testigos, el príncipe Guillermo ha sido visto con asiduidad en Anvaing. Además de luxemburgués, el heredero habla francés, inglés, alemán y español de forma fluida.
Novia con abolengo
La condesa es la hija menor del conde Philippe de Lannoy y de Alix della Faille de Leverghem. Tiene 28 años, nació el 18 de febrero de 1984, vive todavía en la casa paterna, el imponente castillo Anvaing, en la región belga de Henegouw, es licenciada en filología germánica por la Universidad de Lovaina con un máster en Berlín y habla con fluidez tres idiomas. Además del francés y del alemán, la condesa domina el ruso.
