18/04/2024
07:31 AM

El gran ícono del arte naíf en Honduras

El laureado primitivista Roque Zelaya Acosta tiene más triunfos que enorgullecen a Honduras.

    Pocas veces se tiene el placer de saber más de gente como Roque Zelaya, un pintor espectacular que ha impresionado con su estilo primitivista y cotidiano de la vida de los pueblos de Honduras y su pasado.

    Zelaya escogió el arte primitivista, naíf o ingenuo porque le decía “a mi hija bromeando, cuando ella me dijo que no era fácil explicarlo, que a lo mejor “El arte primitivista me escogió a mí”. Porque es como pintar justo lo que Dios creó en su momento; la belleza y el florecimiento de la vida, animales, agua, frutas, flores silvestres, mucho verde y hasta dos personas”.

    En este 2011, su indiscutible talento quedó plasmado en un catálogo mundial de una de las más prestigiosas galerías de arte naíf y por si fuese poco, en su natal San Antonio de Flores, Choluteca, se declaró “La fiesta municipal Roque Zelaya.

    ¿Cuales son las cualidades consideradas para que su arte esté en la portada de este calendario internacional?

    Tiene mucho que ver la calidad de la obra, misma que resulta por la dedicación plena al trabajo. Un trabajo, en este caso una pintura, precisa de absoluto empeño, sin pensar en otra cosa que no sea la calidad deseada.

    ¿Qué representa este logro?

    Representa muchas cosas. El campo, por ejemplo, la vida en él, la gente de tierra adentro, sus quehaceres, sus costumbres. Por esto y por ellos pinto lo que pinto, y sin esta vida hermosa e incomparable de Dios y la naturaleza, yo no sería artista primitivista y tampoco estaría en esta posición respecto al arte “naíf” en el mundo.

    ¿Qué siente con los halagos que le da Dan Chill en la carta que le dejó sobre su distinción al ser escogido para este honor?

    Siempre un buen resultado, llega al alma y llena el espiritu, y el corazón siente el estímulo, de lo que una emoción representa. El señor Chill, tiene un concepto particular para con mi trabajo y lo deja evidenciado en su particular opinión hacia mi persona, su comentario es sencillamente hermoso.

    ¿En 2011 qué logros ha obtenido en su carrera artística?

    Empezando 2011, a comienzos de abril, se reproducen 4 pinturas mías, a través del Giclée, de Rubén Merlo e Ileana Cerrato. Esto ha representado una serie de exposiciones de mi obra en reproducción, desde Roatán a Tegucigalpa.

    En julio se inaguró en el Museo del Hombre Hondureño mi exposición de Dibujos: “Líneas al carbón”. En agosto en una exposición colectiva en el Instituto Hondureño de cultura Hispánica.

    En septiembre, el alcalde municipal de mi pueblo natal, San Antonio de Flores, Choluteca; César Núñez y la directora del centro básico profesora Carmen Mejía, oficializaron el 28 de septiembre de cada año, “La fiesta municipal de Roque Zelaya”, con muchos eventos, particulamente artísticos culturales.

    Este año 2011, como desde 2003, tengo exposición colectiva permanente en la Galería de arte Naíf, Gina’s Gallery ubicada en New York y Tell Aviv, Israel.

    ¿Qué de diferente tienen las obras de Roque Zelaya en comparación con los otros 200 artistas de 32 países del mundo que fueron incluidos por esta galería?

    Todos los pintores primitivistas de aquí y de allá, pintamos lo mismo: nostalgias, más que todo, pintamos fiestas, ferias, funciones, piñatas, bodas, transportes, como las baronesas, reuniones familiares, campesinos trabajando, señoras en el río, el pozo o la quebrada, niños jugando. Pintamos casas, aldeas, pueblos, etc. La diferencia estaría talvez en la calidad del trabajo. Me gusta la excelencia, el trabajo impecable, limpio, excelso, que merezca estar en una habitación o sencillamente en un museo.


    ¿Cómo llega Roque Zelaya a galería Gina?

    En 1981, Dan S. Chill, estando en Tegucigalpa y siendo funcionario del gobierno de su país, Israel, compró frente al hotel Honduras Maya, un cuadro mío que se llama “Una toreada en Pespire”. Cuando obtuvo su retiro empezó con el plan que tuvo desde aquella compra, de crear una galería, expresamente del arte naíf de pintores de tantos países como pudiera.


    ¿Cuáles son sus próximos proyectos?

    En este mes de octubre se inagurará en Copán Ruinas, mi exposición de dibujos, por medio del mismo Museo del Hombre. Esta vez serán 35 piezas porque le agregaré cinco temas de Copán. A finales de octubre aparecerá en el almanaque Escuela para Todos una pintura mía, “San Antonio de Flores, Choluteca”, en la portada del mismo, a petición de esa fundación de San José, Costa Rica. El almanaque circula por toda Centroamérica, en particular, en pueblos y caseríos.


    ¿Exposiciones a venir?

    El embajador de Honduras en Alemania, Efraín Díaz Arrivillaga, quiere que exponga allá, pero prefiero exponer en Honduras. Más fácil.

    ¿Qué lo satisface como pintor?

    Saber de mi camino recorrido me entusiasma, que muchas personas me dieron la mano en todo este trayecto, saber que se los agradezco y tener siempre la fe que en este cuadro que pinto ahora, no sea el último.


    ¿Cómo ve el futuro de los pintores de Honduras en el exterior?

    Ahora en Honduras hay personas voluntariosas y de instituciones que proyectan a grupos de pintores hondureños hacia el extranjero, y es con estas muestras que el artista se va abriendo paso y logrando proyectos, fundamentalmente si la obra es de explícita calidad. El esmero con la dedicación son muy importantes.

    ¿Quién es su guía artística a seguir?

    Mi guía artística está en mis memorias y recuerdos. Si el recordar no fuera una virtud, no podría yo tener una guía artística. Yo pinto recuerdos, desde los más sublimes a lo nostálgico.


    ¿Cuáles son las tres características de su éxito y personalidad como pintor?

    Esmero, que es mi desempeño como pintor. Honradez que consiste en mantener la calidad artística sin fines económicos y la prudencia que es en conservar mi identidad como característica de pintor; y que todo lo que pinto o dibujo merezca llevar mi nombre.

    ¿Cuál es la satisfacción más grande que le ha dado la pintura?

    Han sido muchas las satisfacciones en mi vida de pintor y todas parecidas, pero la particular de todas es sin duda estar en la portada del “Libro-catálogo” en donde aparecen los primitivistas minuciosamente selectos de Europa, Asia y América, a través de la “Gina Gallery” con sus sedes en New York y Tell Aviv, Israel.