20/04/2024
12:22 AM

'La escritura es frustración”

  • 19 noviembre 2012 /

El escritor Philip Roth, eterno candidato al Nobel, confirma que abandona el oficio de escribir ficción.

    Pocos anuncios literarios han generado tanto eco como este: Philip Roth se retira. Después de 31 libros, el autor de Pastoral americana, abandona la ficción.

    Se lo dijo a la revista francesa Les InRocks hace unos días y el domingo, en una entrevista al diario The New York Times, lo repitió: “La escritura es frustración. Es frustración diaria, por no mencionar humillación. Ya no puedo enfrentar más días de escribir cinco páginas y tener que botarlas a la basura. No puedo hacer eso nunca más”.

    El rotativo estadounidense cuenta que Roth ahora tiene pegado un papelito en la pantalla de su computadora que dice: “La lucha con la escritura ha terminado” (“The struggle with writing is over”) y enfatiza que ese recordatorio diario le da “enorme fortaleza”.

    En esa entrevista el escritor aclara que había tomado la decisión de dejar de escribir en 2010, unos meses después de escribir “Nemesis”, su última novela publicada.

    Prepara biografía

    “No dije nada sobre el tema, porque quería estar seguro de que era cierto. Pensé: ‘espera un momento. No anuncies tu retiro para después arrepentirte.’ No soy Frank Sinatra. Entonces no le dije nada a nadie, simplemente para ver si era así.”

    ¿Cómo tomó esta resolución? Volvió a leer a Dostoievsky y a Joseph Conrad. Dos, tres novelas de cada uno. Luego leyó cuentos de Turgenev. Hacía 50 años que no los leía: la primera vez lo marcaron. Siguió con Hemingway y Faulkner. Después, Roth decidió leer sus libros. De atrás hacia adelante, partiendo por Némesis (2010).

    Cuando llegó a los años 60, lo detuvo El lamento de Portnoy: esa polémica novela que lo lanzó a la fama en 1969, cuarenta años después le hizo perder el interés en su escritura. Ni miró las tres primeras. “Después de haber leído todo ese gran material y leer mis libros, supe que ya no iba a tener otra gran idea”, dijo.

    Actualmente el escritor trabaja en notas para su biografía, que escribe Blake Bailey, autor de las biografías de John Cheever y Richard Yates. Ha llenado cajas con anotaciones. Pero, advirtió, no es literatura: “Blake me ha quitado un peso de encima. Ya no soy responsable por mi vida y por sacar algo de ahí. Necesitaba mi vida como trampolín para mi ficción. Necesitaba tener algo sólido bajo mis pies para escribir. No soy fantasioso. Ahora trabajo para Blake Bailey”.