Anne Baldassari, presidenta del museo, anunció que avanzan a toda marcha los últimos retoques al palacio del siglo 17 que alberga al recinto.
'Nuestro objetivo es abrir las puertas al público para el primer día del verano (boreal), el 21 de junio', explicó.
La renovación del Hotel Salé, el magnífico edificio barroco de piedra construido en 1659, corrió a cargo del arquitecto Jean-François Bodin y costará al final unos 71 millones de dólares, de los cuales 42 fueron recabados gracias a la exposición itinerante de las obras del artista español, que fueron exhibidas en otros museos del mundo, incluyendo el Reina Sofía de Madrid.
El Hotel Salé estará enteramente dedicado a la presentación de la colección del museo (cuyo acervo incluye 5,000 obras de Picasso y la colección particular acumulada por el artista), así como a exposiciones temporales. Para la reapertura, Baldassari prevé la exposición de unas 450 obras.
Se aclaró que duplicar la superficie de exhibición de este museo inaugurado en 1985, fue posible gracias a que se mudaron las áreas de administración, depósitos y talleres que ocupaban la parte superior.
'Quisimos hacer algo muy sencillo pero muy bello, para convertir a este palacio del siglo 17 en un edificio compatible con la modernidad de Picasso. Fuimos perfeccionistas en todo', concluyó Baldassari.
En la renovación destacan:
-El doble de espacio de exhibiciones (3,800 metros cuadrados).
-Amplio patio de entrada cubierto por una claraboya.
-Un café con una agradable terraza hacia la que no se podía acceder.
-Espacios pedagógicos.
-Auditorio.
-Facilidades para visitantes discapacitados.
-El 'Jardín cubista'.
-Sistemas de alta seguridad.
