Aprende a actuar con niños TDAH en el aula

Este trastorno psiquiátrico afecta al 5% de la población en edad escolar

  • 29 ago 2015

España


Se estima que en cada aula hay un niño con TDAH. Se caracterizan por su hiperactividad, su impulsividad o su falta de atención. La Federación Española de Asociaciones para la ayuda al Déficit de Atención e Hiperactividad ha elaborado una Guía de Actuación en la Escuela y desgranamos los aspectos claves para que los profesores estén bien preparados para la vuelta a la escuela o colegio.

El Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH) es un trastorno psiquiátrico que afecta al 5% de la población en edad escolar.

La Federación Española de Asociaciones para la ayuda al Déficit de Atención e Hiperactividad explica que este trastorno está provocado por un desequilibrio existente entre dos neurotransistores cerebrales: la noradrenalina y la dopamina. Esto afecta de forma directa a las áreas del cerebro responsables del autocontrol y de la inhibición del comportamiento inadecuado.

Los padres de un niño con TDAH pasan muchas horas con él y conocen cómo suele actuar y cómo deben tratarle.

En el caso de los profesores, es cierto que también pasan muchas horas junto a él, pero hay muchos que no conocen este trastorno y no llegan controlar del todo las situaciones que les plantean estos pequeños en su día a día en el aula.
Identificar

Algunas de las características más significativas de un niño con TDAH son:
◾Dificultades para controlar las respuestas, las conductas y las emociones.

◾Problemas a la hora de concentrarse y prestar la atención que requiere la tarea que está realizando en un mismo período de tiempo.

Los comportamientos de un niño con TDAH no son malintencionados, se derivan de los síntomas del trastorno y de su complejidad para mantener en su mente todo lo que aprende. El niño que padece este síndrome conductual no sólo tiene dificultades para retener todo aquello que le enseñan en la escuela sino que también tiene problemas para cumplir con las normas de conducta.

Actuación con un TDAH de primaria

Cuando el alumno con TDAH realiza movimientos incontrolados lo mejor que se puede hacer es evitar la regañina y establecer algún tipo de señal amigable con él como, por ejemplo, guiñarle un ojo.

Esta tarea hay que encomendársela también a los demás alumnos sin TDAH porque muchas veces acaban imitándoles e incluso animándoles a que realicen más esos movimientos.

1. Sé claro y directo: El profesor tiene que ser capaz de ser breve y directo con el niño y mantener el contacto visual.

2. Motívale y rompe con la monotonía: Intenta hacer las actividades más divertidas, premia sus conductas adecuadas, valórale con comentarios sinceros y positivos, refuerza sus buenas acciones con el contacto físico (abrazos, choque de manos…)

3. Estimúlale: Enséñale a organizar el tiempo con relojes o cronómetros; transmítele información mediante dibujos, notas o fichas; disminuye al máximo todos los estímulos irrelevantes de su alrededor.

4. Tareas: Establece rutinas para todo el aula y estructura el funcionamiento de las clases, descríbele detalladamente en la pizarra las tareas que debe realizar y dedica tiempo al principio de la clase para organizar todo el material.

Actuación con TDAH de secundaria

Las pautas que los profesores deben seguir con los adolescentes son muy parecidas a las detalladas sobre los niños de primaria aunque requieren de una adaptación conforme a la edad y a la capacidad de los jóvenes en cuestión.

Un alumno con TDAH en secundaria se caracteriza por ir desganado al colegio o al instituto, se aburre en las clases, no entiende las explicaciones del profesor, sus calificaciones son bajas a pesar de ser inteligente y suele dejar las tareas para el último momento.


1. Forma de impartir las clases: Evita la abundancia de explicaciones verbales, enséñale técnicas de estudio, fomenta el trabajo cooperativo, divide el trabajo en pequeñas cantidades…

2. Enséñale a aprender: Mantén una comunicación fluida con los padres del joven para informarles de qué manera pueden ayudarles a fortalecer su aprendizaje; enséñale a hacer las cosas bien.

3. Motívale: Ofrécele algún incentivo que le ayude para conseguir su meta.

Cómo evaluar

Cuando el profesor prepara los exámenes rutinarios debe tener en cuenta que la evaluación a los escolares afectados por TDAH tiene que ser personalizada con el fin de combatir el fracaso escolar y respetar los principios pedagógicos de calidad, equidad y atención a la diversidad del alumnado.

Algunos de los consejos que establece la Guía de Actuación en la Escuela ante el Alumno con TDAH son los siguientes:

◾Determina si la prueba va a ser escrita o oral, o si el formato que va a seguir será tipo test, de desarrollo, frases a completar… Puedes recopilar los formatos de exámenes de los demás profesores y así elegir el que más se ajuste al alumno.

◾Entrega el examen ya con las preguntas copiadas para evitar que la lentitud a la hora del dictado de las preguntas le reste tiempo en la prueba.

◾Si el alumno presenta problemas de escritura se le puede ofrecer que realice el examen de forma oral o mediante un ordenador.

Durante el examen el profesor también puede facilitarle el trabajo:

◾Comprueba que el alumno comprende bien todas las preguntas.

◾Permítele que se mueva en el asiento o se levante cuando lo necesite porque su actividad motora no le capacita para estar todo el tiempo de la prueba sentado.

◾Si se le observa muy cansado, puede dejar al chico que haga el examen en dos sesiones.

Finalmente, el tutor debe recordar al alumno que revise todas las preguntas antes de entregar el examen y comprobar que están todas contestadas.