San Pedro Sula, Honduras.
Para tener una piel tersa, sana y bella protéjala de los rayos solares UVA y UVB.
Siga una buena higiene diaria y alimentación sana con muchas frutas y verduras.
La limpieza debe hacerse de forma diaria, usar un jabón neutro que suele encontrarse en las farmacias.
Un segundo aliado para tener una piel sana es la higiene, señaló Fermín Jurado, dermatólogo. Es indispensable el baño diario.
“Hay bacterias externas que encuentran un terreno fértil para dañar la piel cuando no se tiene la higiene adecuada”, explicó.
El baño no tiene que durar menos de 10 minutos; el agua, tibia, porque la fría o caliente provoca resequedad y comezón.
Y, contrario a lo que dirían las abuelas, no hay que usar nada para tallar la piel. “La gente piensa que mientras más rasposo el zacate es mejor, pero la realidad es que si raspa más, daña más”, expresó Jurado.
Hidrátese
Para conservar la piel es necesario hidratarla y lubricarla aplicando crema del cuello hacia abajo inmediatamente después del baño, señala Rossana Llergo, dermatóloga.
Mientras que en el rostro se debe usar cremas especiales para esa área. Crema limpiadora, hidratante y exfoliante de uso diario.
“La piel necesita un aporte de emoliente, de grasa, para otra vez restaurar la barrera cutánea, mantenerse lubricada, ser más flexible y resistir mejor las agresiones ambientales”, dice.
Para escoger la crema adecuada, las pieles que producen mayor cantidad de grasa, como las de los adolescentes, necesitan una más ligera, mientras que las pieles más secas, como las de los adultos mayores, requieren cremas más densas.
Siga estas recomendaciones y logrará tener una piel más bella y saludable.
Cuidados básicos para tener una piel suave y limpia
1. Para protegerse de los rayos UV, considere: Usar bloqueador solar de forma diaria.
Evitar exponerse a los rayos solares de las 10:00 am a 4 de la tarde.
Revisar que tenga factor de protección solar (FPS) 30 o más.
Aplicar el bloqueador media hora antes de salir al sol.
Utilizar gorra o sombrilla.
2. Observe la piel, no está sana si hay:
Comezón, irritación o enrojecimiento.
Erupción, granos y descamación.
Piel seca que no mejora con cremas comunes.
Presenta manchas blancas u oscuras.
Aparecen lesiones que tardan en sanar.
Lunares que crecen, tienen distintos tonos, están abultados o irregulares.
3. Limpieza diaria, pero eficaz:
Utilice desmaquillantes fisiológicos, especialmente formulados para cuidar la piel.
La piel del contorno de los ojos es diez veces más fina que la del resto del rostro y debe limpiarse bien.
Una o dos veces a la semana, recuerde usar un exfoliante.