Ingerir alimentos que han superado su fecha de caducidad representa un riesgo para su salud.
No importa que a simple vista parezcan seguros, muchos desarrollan esporas y bacterias -no perceptibles olfativa o visualmente- que provocan infecciones e intoxicaciones.
Indicador de la vida útil de un producto, la fecha de caducidad se traduce en el límite de tiempo en el que un alimento mantiene sus características de calidad y, más importantes aún, sanitarias.
“La recomendación, definitivamente, es no comer alimentos que han superado su fecha de caducidad. No importa que sean más baratos”, advierte Javier de la Cruz, docente del área de ciencias del Superior de Gastronomía.
“A diferencia de la fecha de consumo preferente, que, como su nombre indica, es una recomendación del productor sobre el periodo de consumo de un alimento, la fecha de caducidad es terminante”.
Claves.
Son cuatro los factores que determinan la vida útil de un alimento procesado: tipo de comestible, aditivos o conservadores añadidos, empaque y métodos de conservación. Estos elementos también determinarán el nivel de riesgo al consumirlos tras haber superado su fecha de caducidad. “Hay un margen de consumo, determinado por el tipo de alimento y su empaque”.
“El pan de caja comercial, por ejemplo, tiene un proceso de elaboración y empaque que garantizan su frescura durante cierto tiempo. ¿Se puede comer después? Sí, aunque ya no será esponjoso, no tendrá características sensoriales adecuadas y podría contener esporas de hongos”, apunta De la Cruz.
“Los cereales comerciales son similares; se conservan bien, pues las bacterias requieren de un ambiente en el que haya humedad para crecer. Después de la fecha de caducidad, simplemente perderán su textura crujiente o se harán rancios. Si los comemos, seguramente no pasará de una infección estomacal leve, pero está latente el riesgo de adquirir bacterias muy dañinas”.
Aunque llega a perder aromas y sabores, la miel puede permanecer en buen estado durante décadas, siempre y cuando se almacene en envases sellados y sin cambios bruscos de temperatura. Para apreciar sus características, los expertos recomiendan consumirla en un tiempo máximo de dos años.
¿Cuál es cual?
FECHA DE CADUCIDAD
Es importante que tenga en cuenta esto al momento de consumir un alimento:
- Límite en el que se considera que las características sanitarias y de calidad de un producto se pierden. - Los alimentos ya no deben comercializarse ni consumirse, pues su ingestión representa un riesgo para la salud, sobre todo carnes y pescados frescos, huevos, lácteos y verduras.
FECHA DE CONSUMO PREFERENTE
Esto debe siempre buscarse en el empaque del producto.
A partir de esta el producto deja de tener todas sus cualidades íntegras, por lo que su color, sabor o consistencia pueden verse alteradas. Informa acerca del periodo de tiempo durante el cual ese alimento puede ser consumido sin que suponga algún tipo de riesgo para la salud.