España.
Se puede elegir difrentes de lugares para vacacionar; playas paradisíacas, puertos pintorescos, ciudades plagadas de historia, sitios arqueológico, es todo lo que se va a encontrar a orillas de un mar azul infinito, rojos atardeceres y verdes horizontes, según detalla la publicación de Hola.com.
PIRAN, ESLOVENIA
Una lengua de mar asomada al Mar Adriático y con uno de los cascos medievales mejor conservados de toda Europa por el que caminar y sorprenderse. No hay nada mejor que cenar en alguna de las terrazas de sus restaurantes situados al borde del mar contemplando sus atardeceres.
No hay que dejar de acercarse a Portoroz, el puerto deportivo más lujoso y exclusivo del país; el castillo medieval de Predjama, muy cerca de Piran y construido en la boca de una cueva; y las espectaculares cuevas de Skocjan declaradas Patrimonio de la Humanidad.
MALTA. Acantilados de belleza singular, pueblos fortificados y una rica gastronomía es lo que nos espera en este archipiélago. En la imagen, la Valetta, ciudad Patrimonio de la Humanidad, completamente fortificada con sus murallas del siglo XVI y donde perderse por sus calles es toda una delicia.
Además está La isla de Gozo llena de calas desiertas, acantilados de vértigo, bahías color turquesa y un entorno natural de belleza intacta; bucear en la Laguna Azul entre las islas de Comino y Cominotto con sus ricos arrecifes.
Malta.
COSTA BRAVA, ESPAÑA. Una de las zonas más bellas de nuestro litoral mediterráneo, 214 kilómetros de la costa de Girona que se extienden entre Portbou y Blanes, donde perderse entre calas maravillosas, pueblecitos medievales, parques naturales y un triángulo artístico cuna del genial Dalí que forman Port Lligat (en la imagen), Púbol y Figueres,
Costa Brava.
CRETA, GRECIA. Una isla donde historia y leyenda se entrecruzan, con espectaculares sitios arqueológicos como Knossos (en la imagen), cuna de la civilización minoica, playas de ensueño y una rica gastronomía mediterránea, lo que hacen de ella un lugar idílico para unas vacaciones. El palacio de Knossos es un lugar fabuloso y perfectamente conservado allí donde Teseo, ayudado por el hilo de Ariadna, recorrió el laberinto y derrotó al furioso minotauro, mitad hombre, mitad toro.
Greta.
KOTOR, MONTENEGRO. La bahía de Kotor impresiona por su belleza. Un litoral lleno de acantilados, escarpado, que esconde muchos secretos, como las playas de Ulcinij o la ciudad de Kotor, declarada Patrimonio de la Humanidad, con un casco antiguo que es todo un viaje a la Edad Media, y la villa de Perast, en la imagen, una pequeña joya barroca en la lista de la Unesco con bellos edificios del siglo XVII e iglesias interesantes que visitar.
Kotor.
MENORCA, ESPAÑA. Todo son maravillas en esta isla tranquila, paraíso mediterráneo perfecto para los amantes de la naturaleza, de la cultura, de los atardeceres infinitos y de los deportes al aire libre. Son sus calas las auténticas estrellas, desde Macarella a Macarelleta, Son Bou, Galdana, Mitjana, Sa Mesquida o Cala Turqueta algunas de las imprescindibles.
MENORCA.
PORTOFINO, ITALIA. Entre el monte y el mar se esconde este rincón perfecto y exclusivo lugar de vacaciones elegido por artistas, políticos, aristócratas y amantes de la buena vida. Además es una coqueta villa marinera encajonada en un pequeño entrante que gracias a su ubicación geográfica que le ha impedido crecer mantiene intacta su esencia. Lleno de boutiques exclusivas, selectos restaurantes y hoteles llenos de encanto es un lugar idóneo para darse un capricho.
Portofino.
CÓRCEGA, FRANCIA. Más de doscientos kilómetros de playas de arena blanca, muchas de ellas vírgenes, aguas cristalinas y naturaleza de un verde intenso gracias a sus bosques de pinos salpicados por lagos color esmeralda. Así es esta isla donde el tiempo trascurre lentamente, orgullosa cuna de Napoléon.
Córcega.
POSITANO, ITALIA. La Costa Amalfitana es una de las más bellas del Mediterráneo, con un rosario de pueblecitos colgados sobre la roca como Positano, en la imagen, con sus casas en tonos pastel que destila el aroma de la dolce vita.
