Redacción.
Christina Applegate y Linda Cardellini protagonizan Dead to Me (traducida como Muertos para mí), la nueva serie de Netflix que promete tenerle entretenido este fin de semana. Es un interesante y entretenido trama que habla de solidaridad femenina, duelo y unos cuantos secretos. Todo, con un tono que mezcla drama, humor negro y suspenso.
Esta serie creada por Liz Feldman, guionista de Dos chicas sin blanca, presenta a una viuda impulsiva(Applegate) que ha perdido a su marido en un trágico accidente y busca a su asesino. Ella que comparte su tiempo entre la crianza de sus dos hijos y su trabajo como corredora de propiedades.
Christina Applegate y Linda Cardellini protagonizan Dead to Me (traducida como Muertos para mí), la nueva serie de Netflix que promete tenerle entretenido este fin de semana. Es un interesante y entretenido trama que habla de solidaridad femenina, duelo y unos cuantos secretos. Todo, con un tono que mezcla drama, humor negro y suspenso.
Esta serie creada por Liz Feldman, guionista de Dos chicas sin blanca, presenta a una viuda impulsiva(Applegate) que ha perdido a su marido en un trágico accidente y busca a su asesino. Ella que comparte su tiempo entre la crianza de sus dos hijos y su trabajo como corredora de propiedades.
En un grupo de apoyo a víctimas hace amistad con otra mujer (Cardellini) que vive algo similar, una loquilla medio excéntrica que esconde un par de secretos que le pueden dar un giro a la trama y a la amistad.
El compañerismo entre ambas es un tesoro. Se acompañan, se cuidan, se divierten una con la otra. La sororidad las mantiene en pie, firmes, pero hay cosas que ambas irán develando y descubriendo a lo largo de los capítulos, situaciones que irán desafiándolas en esa complicidad.
Hacen reír y emocionar, pero los episodios se equilibran con una buena dosis de suspenso que hace dudar sobre lo que vendrá.