California, Estados Unidos
Cuando la portátil o la PC dejan de funcionar surge un problema no solo cuando se está en el trabajo, sino en cualquier situación de la vida diaria. ¿Cómo se puede descubrir lo que va mal?
El peor escenario imaginado por un usuario es cuando, pese a darle al botón, la pantalla no se enciende y no se oye ningún ruido.
“Entre los problemas clásicos está el de las computadoras que no encienden”, señala el informático Jörg Stenzel.
En ese caso hay que tener paciencia, persistencia y un poco de curiosidad. En el caso de las notebooks vale la pena antes que nada mirar el cargador. “La mayoría llevan diodos luminosos y si no tiran luz es que no funcionan”, señala Stenzel.
Si se trata de una PC, un buen indicador es el ventilador del CPU. “Si no gira es que la fuente de alimentación no funciona”, señala el experto.
Si está encendido o el ventilador gira pero la computadora no enciende, la causa es muy probablemente otra. En ese caso puede que el disco duro esté defectuoso, y eso impide que la máquina se encienda.
No obstante, los discos duros rara vez se rompen de golpe, sino que “a menudo un disco duro que tiene problemas hace ruidos extraños o genera una pantalla azul de Windows (de errores)”, señala Martin Kasztantowicz, experto en PC. Otro problema habitual con las notebooks se debe a su carácter portátil: como el cable de alimentación se enchufa y desenchufa constantemente muchas veces se daña.
“Los cables defectuosos suelen ser una fuente común de los problemas y pueden causar a su vez daños en la batería y la propia notebooke_SDRq, alerta Jörg Stenzel.
Si lo que está mal es la capa de aislamiento del cable se puede probar envolviéndolo con cinta adhesiva o pegamento de silicona antes de comprar uno nuevo. De esa forma se evita que llegue a cortarse.
