Redacción
A pocas semanas de su lanzamiento, un reporte emitidos por la agencia de noticias Bloomberg sugiere que Apple todavía no decide que nombre ponerle al iPhone que presentará este año.
Irónicamente, el reporte señala que la parte de diseño y los cambios internos de los nuevos dispositivos ya se encuentran finalizados y es la parte del nombre la que parece estar dándole un dolor de cabeza a la compañía de la manzana.
Así las cosas, Bloomberg indica que preliminarmente la compañía estaría considerando mantener el nombre iPhone X de modelo principal, el de 5.8 pulgadas, al que le añadiría el sufijo “S” para diferenciarlo del que presentó el año pasado. Este mismo sufijo ya ha sido usado en el pasado para definir un modelo con pocos cambios, comparado con la versión anterior. En este caso, esos cambios incluyen un mejor procesador, mejor cámara y batería más eficiente.
Para el modelo más grande, el de 6.5 pulgadas, el presunto nombre sería iPhone X Plus, que es el sufijo que por lo regular Apple usa con el dispositivo de mayor tamaño. Como característica innovadora (para Apple, en todo caso), es que tendrá soporte para una segunda tarjeta SIM y una batería de mayor tamaño.
Sin embargo, no siquiera Bloomberg se atrevió a especular cómo se llamara el tercer modelo, el de 6.1 pulgadas, lo que no ha detenido los rumores en otros medios, que sugieren que este dispositivo se llamará iPhone 9 al suponer una actualización del iPhone 8 presentado en 2017.
Algo que sí menciona el reporte sobre este último modelo es que será el que tenga el precio más módico y que vendrá en una variada paleta de colores, incluirá funciones de alta gama como Face ID, y su diseño será similar al de los otros dos modelos, si bien sus partes metal serán de aluminio y no de acero, pero al igual que el modelo ‘Plus’, traerá una ranura adicional para una segunda SIM.
