Me encontraba en Guadalajara como orador asociado del célebre Og Mandino. Esa noche le escuché la historia de “Las manos de Dios”. Me impresionó notablemente. Era una anécdota de quien no se sabía el
“No preguntemos si estamos de acuerdo, sino tan solo si marchamos por el mismo camino”: Goethe.La necesidad de establecer acuerdos es fundamental para el