Choloma, Honduras.
Diana Gabriela Herrera Delcid (18) salió de su casa con la alegría de celebrar el Día del Estudiante, pero nunca imaginó que en el camino se encontraría con la muerte.
La joven que cursaba el último año de bachillerato en ciencias y letras en el instituto Manuel Pagán Lozano, en la colonia López Arellano, Choloma, fue ultimada la mañana de ayer en el cementerio en el barrio El Chaparro.
La estudiante vivía con sus padres y hermanos en la colonia Reparto San José, a unas cuadras del camposanto donde la mataron de cuatro balazos.
El cadáver de Diana Gabriela fue encontrado boca abajo en medio de las tumbas con dos heridas de bala en la cabeza y dos en los brazos.
Una hermana de la jovencita contó que Diana Herrera salió de la casa minutos antes de las 10:00 am al colegio donde se reuniría para hacer tareas con un grupo de compañeros y posteriormente celebrarían el Día del Estudiante.
La jovencita nunca llegó a la reunión porque se presume que cuando caminaba fue raptada por sujetos que la llevaron al cementerio para asesinarla.
Vecinos relataron a la Policía de Choloma que a eso de las 10:00 am escucharon varias detonaciones que provenían del cementerio, pero no se imaginaron que estaban matando una persona.
Agentes de la unidad de Delitos contra la Vida de la Policía de Investigación dijeron que la jovencita no portaba documentos, por lo cual fue ingresada a Medicina Forense como desconocida a pesar de que los familiares proporcionaron su nombre.
Recibe llamada
Entre las pertenencias que se le encontraron a la víctima estaban el celular y un cuaderno. “Iba sin uniforme, con ropa de color. Llevaba su cuaderno. Ella dijo que iba a reunirse con sus compañeros y que después celebrarían el Día del Estudiante”, relató el papá de la víctima.
El señor manifestó que recibió la trágica noticia de que a su hija la habían matado mediante una llamada telefónica de uno de los policías que estaban en la escena del crimen.
En el cuaderno, la jovencita tenía anotado el número de celular de su progenitor, por lo que el agente lo llamó para que se presentara a identificarla.
Luego de recibir la llamada, el señor tomó su bicicleta, salió de su casa y llegó al lugar con otra de sus hijas. “Me llamó un policía y me dijo que a mi hija la habían matado y al llegar vi que era ella”, dijo llorando.
Luego de que el médico forense, el fiscal de turno y los agentes de la Unidad de Delitos contra la Vida de la DNIC hicieran el levantamiento, el padre y la hermana de la fallecida comunicaron la trágica noticia a los demás miembros de la familia, quienes al conocerla rompieron en llanto.
“Tan bonita que iba al colegio”, expresó la abuela de la víctima. Los parientes de la ahora occisa desconocen por qué la mataron.
Investigan crimen
César Johnson, portavoz de la Policía Nacional, informó que ya se asignó un grupo de investigadores para esclarecer el crimen de la estudiante.
“Desde el momento en que se hace el levantamiento de un cadáver comienza la investigación para identificar al o los supuestos victimarios y capturarlos. En este caso sería el de la estudiante ultimada”, expresó el comisario de policía.
