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La tristeza invade a Gracias, sus habitantes aún no se reponen del impacto que generó el accidente aéreo en el que murieron tres de sus más queridos hijos, hoy ya iniciaron a darles el último adiós a Lili Mondragón y su hijo. La doctora Dori Guillén será enterrada a eso de las 5 de la tarde, cuando su hermana y madre lleguen de Estados Unidos.
Ayer temprano esperaban la llegada de los cuerpos desde Tegucigalpa.
Cuando el reloj marcaba las 12:52 pm, en el cielo se divisó el avión 317 de la Fuerza Aérea Hondureña (FAH) que traía los restos de Lilian Mondragón y su hijo Franco José Díaz.
Vea: Una falla en la aeronave sería la causa de accidente
En la pista del aeropuerto Celaque, sus familiares los esperaban. Nadie hablaba. Los rostros evidenciaban el dolor de ver los dos ataúdes cuando eran bajados de la aeronave.
Javier Mondragon, exalcalde de Gracias y hermano y tío de las víctimas, venía con ellos. Un abrazo con su hermano Omar dejaba al descubierto el sufrimiento silencioso de la familia.
Los amigos se sumaron a dar sus muestras de pesar y solidaridad. Los cuerpos fueron llevados de inmediato a la iglesia Gracia Abundante, donde se congregaban las víctimas.
El pastor Arturo Cardoza salió a recibirlos y , fueron ubicados en el salón que fue acondicionado para su velatorioa.
Desde aldeas y poblados cercanos, la gente llegó. Todos recordaban a madre e hijo. No había nadie que dejara de hablar de las bromas, de la alegría permanente que “Lili”, como la le llamaban, tenía para todos.
Con una oración la recibieron. Había tristeza. Sus hermanos, cuñadas e hijos, están destrozados, pero se afianzan en la fe, en la fortaleza que dicen que Dios les da para pasar este duro momento. “Solo nos queda resta agradecer el apoyo de todo el pueblo que nos acompaña. Somos una familia de Dios y les agradecemos la solidaridad a la gente, al Gobierno, a todos los que nos dan sus mensajes. Estamos destrozados, pero entendemos que estos son los propósitos de Dios”, dijo Javier Mondragón.
El pastor de la iglesia, con su voz entrecortada lamentaba que no pudo despedirse de “Lili”, que no pudo sonreír con ella, pese a que estuvo a pocos metros de Lilian ella, minutos antes del accidente.
“Lili teníia características especiales, apoyaba las actividades de la iglesia y cuando me dijeron que había muerto, pedíamos que fuera mentira, pero pasóo. Ayer en los actos de inauguración de la pista estuve tentado dos veces de por ir a abrazarla. Éramos muy buenos amigos, hermanos en la fe, y quise saludarla, pero algo me detuvo y no pude hacerlo. Cuando escuché la noticia realmente me pregunté por qué no lo hice. Hubiera sido mi último abrazo y la despedida”, dijo el pastor.
Llega féretro de doctora
A las 4:30 pm estaba prevista la llegada del cuerpo de Doris Guillén, la querida doctora, pero la lluvia cambió los planes, por lo que el vuelo fue cancelado. Si ya la tristeza por la pérdida de la médicao amiga del pueblo era profunda, prolongar la espera creaba más angustia. Enfermeras, doctoresmédicos, pacientes, amigos y familiares se quedaron esperando en la pista.
Los globos blancos y morados que portaban sus amigos fueron guardados. Un cintillo negro colocado en el pecho, simbolizaba el recuerdo que de Doris guardan los gracianos.
Se anunció que a la medianoche de ayer su cuerpo llegaría para ser velado un momento en su casa en el barrio Las Mercedes; luego, dos horas en el hHospital Juan Manuel Gálvez, donde laboraba como internista, y en la iIglesia Asambleas de Dios, donde se congregaba.
Si algo lamentan sus amigos es que su muerte se produjo en un momento en que donde la doctora se mostraba alegre y emocionada. Hacía tan solo 24 horas del fatal accidente que orgullosa visitó orgullosa a sus amigos y compañeros para entregarles las invitaciones de los 15 años de su hija mayor.
“Estaba feliz. Quería celebrarle por lo alto el cumpleaños a su hija. La niña ayer 24 cumplió ayer los 15 años en medio de esta tragedia”, expresó Jorge Pineda, compañero de trabajo de la ahora occisa.
De Doris se recuerda el carácter. Era una mujer que imprimía respeto y estaba entregada a su trabajo. Hace apenas año y medio, ella y su esposo fueron víctimas de la delincuencia al ser secuestrados.
Sus plegarias a Dios fueron escuchadas y los secuestradores los dejaron abandonados en unas cañeras en Cortés, pero ella siempre creyó que ese era su milagro. Sin embargo, meses después, Dios la solicitaba en el cielo, para continuar desde allá con su misión de servir.
Son tantas las historias, las anécdotas que de las tres víctimas guardan los pobladores. Pero todas se traducen en frases que revelan la personalidad de seres nobles y especiales.
Anoche, el intercambio de oraciones entre las iglesias donde fueron velados los restos de las tres víctimas, daba un mensaje de hermandad, de unión. Incluso Aún en los peores momentos, aseguran, se tienen lecciones positivas, y no cabe duda de que el fallecimiento de los tres ha marcado la vida de este poblado, pero también los ha hermanado.
“Es un hecho repentino, sin precedentes. Ellos para nosotros eran especiales. No los olvidaremos. Estamos dolidos, pero fortalecidos y agradecidos con el pueblo de Gracias. Perdimos grandes personas. De mi cuñada Lili solo puedo decir le que era una persona bromista, juguetona. Ella estaba en todos los actos, velorios, cumpleaños. Le fascinaba volar y, ya ve, volando acabó su vida”, expresó Doris de Mondragón.
El piloto
Por otra parte, en la ciudad de La Ceiba se esperaba anoche la llegada de los restos mortales del joven estudiante de aviación Harlintong Orlando San Martín, pero debido a la las condiciones de visibilidad en la capital también fue imposible trasladarlo, por lo que se aguarda espera para este día.
Ayer en la morgue capitalina, Orlando San Martín, padre del piloto, expresó, sin poder contener el llanto, que su hijo era un piloto experimentado con más de 200 horas de vuelo, que tenía sueños de convertirse en un piloto comercial.
“Todos los compañeros de él lo apreciaban y le tenían confianza. Todavía el capitán le tenía confianza, porque era uno de los mejores alumnos que había tenido, pero desgraciadamente, sucedió esto”, agregó el acongojado padre.
Investigan accidente
José Israel Navarro, director de Aeronáutica Civil, informó que ya se formó una comisión de investigación para determinar las causas del accidente que se dio en la comunidad de Villa Verde, Lempira, en las cercanías del recientemente inaugurado aeropuerto de Celaque.
Una de las primeras hipótesis sobre el del accidente es que el motor de la aeronave perdió potencia y no pudo aterrizar y se estrelló, como ya es conocido. Se espera que la próxima semana se tenga un informe pormenorizado de lo ocurrido.
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