Para que no los delatara -según la Policía- sus propios compinches mataron en una clínica a José Enrique Bardales (30), quien habría participado en un tiroteo la noche del pasado martes enfrente de un hotel en esta ciudad.
Xavier Ortiz, vocero de la Policía, señaló que las investigaciones preliminares del caso, realizadas por agentes de la Dirección Nacional de Investigación Criminal (DNIC) y la Unidad de Inteligencia, determinaron que Bardales fue uno de los sicarios que inició el enfrentamiento armado que alarmó a la población ceibeña.
A eso de las 7:30 pm del martes, el hoy occiso se transportaba en un turismo blanco con individuos que aún no han sido identificados y abrieron fuego contra un carro doble cabina, blanco que se conducía por la carretera CA-13 cerca de un hotel ubicado en la colonia El Toronjal. Los hombres a bordo del vehículo blanco entonces repelieron el ataque originándose un tiroteo.
En el incidente resultaron heridas tres personas: José Luis Murillo y su acompañante que viajaban en el doble cabina blanco y José Enrique Bardales, quien se transportaba en el turismo. Los dos heridos que iban el pick up y Bardales fueron llevados a distintos centros asistenciales privados.
Bardales fue trasladado al hospital Euro Honduras y según la Policía, sus acompañantes se dispusieron a buscarlo y asegurarse de que no les diera declaraciones sobre del incidente.
En el hospital, los individuos ingresaron a la sala de emergencia y le pidieron a la enfermera que lo atendía, que se hiciera a un lado. De varios disparos se aseguraron de acabar con su vida mientras yacía en una camilla. Cuando se disponían a salir se encontraron con José Ramón Roque (35), quien era el guardia de seguridad del sanatorio y también lo ultimaron de varios disparos.
Hasta ayer los otros hombres heridos en el incidente permanecían estables en clínicas privadas de esta ciudad.
