20/04/2024
12:23 AM

En edificio en ruinas funciona el Centro Pedagógico El Carmen

Fiscalía de la Niñez asegura que se hace una investigación de las acciones que se generan en el centro, ante las quejas de los internos por la mala alimentación

San Pedro Sula. Dos fugas de menores en menos de 20 días no solo ponen al descubierto la fragilidad de las instalaciones, sino la falta de vigilancia y control en el Centro Pedagógico El Carmen, en esta ciudad.

Pese a las advertencias constantes del personal de la institución dirigidas al Juzgado de la Niñez y la Fiscalía, ninguna autoridad ha tomado en serio la problemática y la amenaza de una nueva fuga está latente.

De 50 integrantes de la pandilla 18 que han estado internos en la correccional, 20 han escapado y los 30 que quedan amenazan con huir ante la falta de buena alimentación y la negativa de trasladar los pandilleros a Támara.

A esto se suma la falta de control de los jueces, quienes, según el personal del Centro, no están revisando los expedientes de los menores y muchos llegan a cumplir 18 años sin ser trasladados a un penal, de acuerdo con la infracción cometida.

No solo es que cumplen los 18 años en el centro de menores, sino que muchos ingresan siendo mayores porque no se corrobora la identidad de los supuestos menores.

“El problema es que las autoridades no investigan las verdaderas edades de los supuestos menores que son enviados al centro. Muchos se cambian el nombre y no se corrobora con el Registro Nacional de las Personas para verificar la verdadera edad de cada infractor que envían a este lugar”, dijo un empleado del centro de menores El Carmen.

Los problemas

Varios factores facilitan el escape de los menores. La falta de energía eléctrica en los pasillos que conducen a los módulos limita la vigilancia de apenas tres guardias privados que ha contratado el Centro Pedagógico.

“Se pagan guardias privados para el área, pero poco pueden hacer. Solo son tres en el área de internamiento, que está sin energía. La cerca eléctrica está desactivada. Hay que invertir para habilitarla de nuevo”, explicó el director de la correccional.

Pese a que el centro cuenta con talleres, estos no funcionan y no hay técnicos que impartan enseñanzas de panadería, carpintería, sastrería y electricidad, por lo cual los menores destinan a veces el tiempo al fútbol, pero otros planifican acciones negativas que afectan la institución, como la ruptura de paredes y pisos, que han usado para fugarse.

“El Instituto Hondureño de la Niñez y la Familia (Inhfa) tiene toda la responsabilidad y debe tomar las medidas para evitar la fuga de menores. El control deben ejercerlo las autoridades del centro, que han trasladado menores a otros centros sin haber comunicado nada a fiscales ni jueces”, explicó Juan Carballo, titular de la Fiscalía de la Niñez.

Debido a las irregularidades en el centro de menores, el fiscal informó que se hace una investigación; la Fiscalía de Derechos Humanos determinará si hay violaciones contra los menores u otras acciones que perjudican a los internos.

“No es posible que con los traslados de menores muchos jueces pararon los juicios porque los menores fueron trasladados y no nos comunicaron nada. Recordemos que a ese centro llegan menores de varios juzgados del país y por eso deben informar”.

Las autoridades esperan que el nuevo Gobierno programe el tema de la niñez para atender las múltiples necesidades que presentan los centros del Ihnfa de todo el país.