En medio de un completo hermetismo y bajo fuertes medidas de seguridad, los miembros de la DLCN (Dirección de Lucha contra el Narcotráfico) trasladaron los 344 fardos de pseudoefedrina al plantel de una industria cementera con la finalidad de destruir el producto.
Sin permitir el ingreso de los medios de comunicación en la 105 Brigada de Infantería ni en el plantel cementero, los agentes antidrogas custodiaron junto con los miembros de las Fuerzas Armadas hasta la aldea Bijao, donde está la industria.
En ese lugar supuestamente habrían utilizado uno de los hornos industriales de esa procesadora con el propósito de destruir todo el componente para fabricar droga sintética. Un contingente militar custodió el contenedor en que llevaban los fardos del producto, a tal grado que ni los voceros de la DLCN ni el Ministerio Público conocían la acción que se ejecutaba ayer desde las 7:00 am y que habría finalizado por la tarde.
Hermetismo
Elvis Guzmán, portavoz del Ministerio Público, informó que no tenía conocimiento de la incineración; del mismo modo, Carlos Vallecillo, vocero de la DLCN en Tegucigalpa, mencionó que desconocía el proceso. Ni a los miembros de Medicina Forense les querían permitir el ingreso al plantel, hasta que pidieron la autorización desde la caseta de vigilancia.
Con la acción se generó la duda entre los representantes de los medios de comunicación que asistieron al lugar, quienes llegaron con la idea de informar de la supuesta quema de la droga confiscada la semana pasada.
