Tras el asesinato de seis personas ocurrido la noche del jueves en la colonia Las Ayestas de la capital, las autoridades aún no dan a conocer los avances en las investigaciones o al menos una hipótesis sobre el móvil y los autores.
Ayer, en medio del dolor, el llanto y la indignación, los familiares retiraron los cuerpos de las víctimas. El hecho sangriento sucedió a eso de las 10:00 pm del pasado jueves, cuando las personas se encontraban sentadas en una acera y de pronto llegaron varios individuos fuertemente armados, quienes primero los despojaron de las pertenencias y luego les dispararon con armas automáticas en varias ocasiones.
En el acto expiraron Ángel Francisco Durón Raudales (45), Dulce María Serpas Montoya (32), Ronny Javier Contreras (26) y Gerson David Bonilla Ramos (26).
Brayan Adonis Aguilar Benavides (25) y Keidy Vanessa Flores Sánchez (19) resultaron gravemente heridos y fueron trasladados a la sala de emergencia del Hospital Escuela, donde fallecieron pocos minutos después.
El informe oficial de la Dirección Nacional de Investigación Criminal (DNIC) establece que el hecho fue un homicidio y que la causa de muerte de las seis personas fue laceración cerebral producida por proyectil disparado por arma de fuego.
Reclaman cadáveres
La mañana de ayer, los familiares llegaron a reclamar los cadáveres en la morgue capitalina.
Uno de ellos comentó que Ronny Javier Contreras era voluntario de la Cruz Roja Hondureña y se dedicaba a cuidar a una mujer que reside en la colonia Las Ayestas, a pocas cuadras de donde ocurrió la masacre cuando la víctima regresaba a su casa en la colonia Altos de la Mayangle. Contreras era originario de Yauyupe, El Paraíso, adonde fue trasladado el cuerpo sin vida por sus familiares. Ángel Francisco Durón Raudales era albañil y residía a pocas cuadras de donde le quitaron la vida.
Marta de Jesús Raudales, madre de Ángel Francisco, explicó que su hijo no tenía problemas con nadie, sino que se dedicaba a ayudar a las personas más necesitadas.
“Mi hijo era miembro del partido Libre, andaba con banderas y afiches de ese partido, pero era muy querido en la colonia”, dijo la acongojada madre.
En medio del llanto, la mujer les suplicó a las autoridades que no dejen esa nueva masacre en la impunidad y clamaba por justicia.
Brayan Adonis Aguilar Benavides era mecánico y residía en la colonia Las Ayestas, en la misma cuadra donde le quitaron la vida violentamente.
Keidy Vanessa Flores Sánchez era estudiante del instituto Santa Cecilia. Este año se había matriculado en tercer curso de ciclo común y residía en la casa frente al sitio donde fue acribillada. Otro fallecido fue el albañil Gerson David Bonilla Ramos, quien vivía a una cuadra de donde ocurrió el lamentable hecho.
Mientras tanto, se conoció que Dulce Melissa Cerna Montoya estaba con dos meses de embarazo, tenía cuatro hijos y había sido activista del Partido Nacional en las elecciones internas de noviembre pasado.
