En un lapso de cuatro horas, el personal del Ministerio Público levantó ayer tres cadáveres producto de homicidios ocurridos en el Valle de Sula.
En la aldea La Coroza, Villanueva, jóvenes integrantes de maras ultimaron a balazos a dos hombres a eso de las 4:30 pm.
El hecho se suscitó en el patio trasero de una pulpería y una de las víctimas era J Manuel Antonio Matheu (37), guardia de seguridad de una fábrica de productos de concreto en Búfalo, Villanueva.
La otra persona no fue identificada debido a que no portaba documentos personales y al lugar no llegó ningún pariente a identificarlo. Su cuerpo quedó con varios disparos en la cabeza en un pasillo entre la pulpería y la vivienda aledaña.
Según lo relató la esposa de Matheu, él se encontraba dentro de la pulpería cuando un grupo de pandilleros irrumpió el negocio, lo sacaron, lo llevaron a la parte de atrás y le dispararon varias veces en la cabeza.
El cadáver del celador quedó boca abajo en un charco de sangre y a su alrededor varios casquillos de fusil AK-47. “Venía de trabajar y yo trabajo con el dueño de la pulpería y se vino para donde mí, de repente llegaron ellos -los mareros- y lo sacaron para matarlo”, dijo la viuda. Matheu tenía siete años de laborar como guardia de seguridad en la empresa.
En otro hecho, en la colonia Sandoval Sorto de San Pedro Sula, fue ultimado a balazos dentro de su casa otro guardia de seguridad identificado como Edliberto Padilla Licona (34). El hecho ocurrió en la 24 calle, bloque 13 de la citada colonia a eso de las 5:30 pm. Según relatos, dos hombres que se conducían en una motocicleta se bajaron y sin hablarle le dispararon y huyeron.
