Supuestos asaltantes asesinaron ayer a un suboficial de la Fuerza Aérea Hondureña (FAH) cuando se conducía en un vehículo por el anillo periférico, cerca del complejo deportivo de la Villa Olímpica en la capital.
La información preliminar que conoció la Policía es que los maleantes se habrían llevado una fuerte suma de dinero que supuestamente el suboficial y su acompañante habían retirado de un banco.
El suboficial José Hilario Gómez Martínez (34), asignado a la pagaduría de la FAH, expiró cuando era intervenido en el quirófano del Hospital Escuela.
Su acompañante, el auxiliar de la institución Roger Geovany Sierra Martínez, logró sobrevivir y fue trasladado al Hospital Militar.
Los dos fueron atacados con fusiles AK-47 y pistola 9 milímetros por malhechores que se conducían en una camioneta roja, a quienes equipos de la Policía les siguen la pista.
Eran alrededor de las 11:30 am de ayer cuando los dos miembros de la FAH iban por el bulevar de la Villa Olímpica en un automóvil Toyota 22R azul, con placas RHFA-0547001, propiedad de la institución del Ejército. Según una fuente de las Fuerzas Armadas, ambos regresaban de hacer una transacción en una agencia bancaria del bulevar Morazán.
El atentado
En la vía que sale de la villa Olímpica para tomar el anillo periférico con dirección al Santuario de Suyapa se les atravesó una camioneta roja de la que se bajaron unos delincuentes, quienes les dispararon con armas automáticas. Según testigos, los facinerosos se acercaron al vehículo, sacaron un paquete, supuestamente con dinero, y huyeron en dirección a la Universidad Nacional Autónoma de Honduras.
Unos agentes de la Policía Preventiva que estaban cerca del lugar fueron informados de la balacera y se movilizaron de inmediato, auxiliaron a los heridos y los trasladaron al principal centro hospitalario de la capital en un intento de salvarles la vida.
Mientras tanto, de la central de comunicaciones de la Policía Nacional se alertó a los patrulleros y a los elementos asignados en los retenes para que interceptaran el automóvil y capturaran a los ocupantes. Cabe destacar que a menos de un kilómetro de donde ocurrió el crimen se ubica un retén de la Policía Preventiva.
El automotor en que viajaban los dos miembros de la FAH recibió 15 perforaciones de bala en el vidrio frontal y en el tonó. En el lugar del tiroteo quedaron varios casquillos.
Miembros del Ejército y agentes de la Policía Preventiva llegaron a proteger la escena del crimen y hacer las investigaciones preliminares.
También se presentaron oficiales de la FAH a tomar nota sobre los pormenores del hecho criminal. La principal hipótesis de las autoridades es que posiblemente los delincuentes persiguieron a los dos miembros de la FAH desde que salieron de la agencia bancaria, lo que es investigado por unidades de inteligencia.
