Tegucigalpa, Honduras.
En estado crítico fue ingresada una mujer al Hospital Escuela Universitario (HEU), después de que el fin de semana fuera víctima de una salvaje golpiza que le propinó su marido en la ciudad de Comayagua.
“Siempre ha sido celoso, manipulador, agresivo, siempre pleitos, discusiones, separaciones por un tiempo, después regresaba y se me hincaba pidiéndome disculpas y yo creyéndole, siempre lo perdonaba”, relató con dificultad Haydi Julisa Rivera Lara (30), debido a la magnitud de las lesiones en su cuerpo.
El marido agresor es Edgar Euceda Díaz (27), quien primero huyó, pero enseguida fue capturado por la Policía la misma noche. El acusado decidió someterse a una audiencia de adecuación al proceso expedito, en la que se le dictó prisión preventiva, actualmente está recluido en el Centro Penal de Comayagua.
El violento ataque ocurrió en la colonia Fuerzas Armadas de Comayagua.
El Ministerio Público busca ampliar el requerimiento fiscal contra el agresor por los delitos de tentativa de parricidio y por lesiones para que pueda pagar una condena mayor.
La joven de 30 años ya es madre de tres menores, los cuales no son hijos de su agresor. Ella ya había denunciado a su pareja, ya que es un hombre violento.
“Él quiso apuñalarme y yo le dije que no, que no lo hiciera por mis hijos”, manifestó la joven.
Los hechos
La mujer recuerda que todo comenzó al caer la noche, cuando Edgar Euceda Díaz llegó a la casa.
Según la víctima, “él se molestó porque estaba un muchacho en la casa y se puso celoso, me agredió, quiso pelear con el muchacho, a quien yo le dije que mejor se fuera para evitar problemas”.
Con cierta dificultad para articular palabras, la paciente reveló que cuando ella y su agresor se quedaron solos, “me golpeó la cara por dos veces con el palo del trapeador, puñetazos, me haló el pelo, me tiró al suelo y me siguió golpeando”.
En medio del ataque del hombre, con el que tuvo una relación de dos años y medio, la mujer le gritó a su hija para que la auxiliara y diera aviso a la Policía.
Al preguntarle sobre si antes había sufrido violencia de su marido, ella respondió que “muchas veces desde que comenzó la relación, quizá unas 20 veces, siempre ha sido celoso, manipulador, agresivo, siempre pleitos, discusiones, separaciones por un tiempo, después regresaba pidiendo disculpas y yo creyéndole a él, siempre lo perdonaba y le daba oportunidades”.
Sobre el agresor -quien ya fue detenido- la afectada pide a las autoridades que tomen cartas en el asunto: “La verdad tengo temor que él salga libre, suplico porque tengo miedo que cumpla lo que él quiere, que es matarme”, dijo entre sollozos.
En estado crítico fue ingresada una mujer al Hospital Escuela Universitario (HEU), después de que el fin de semana fuera víctima de una salvaje golpiza que le propinó su marido en la ciudad de Comayagua.
“Siempre ha sido celoso, manipulador, agresivo, siempre pleitos, discusiones, separaciones por un tiempo, después regresaba y se me hincaba pidiéndome disculpas y yo creyéndole, siempre lo perdonaba”, relató con dificultad Haydi Julisa Rivera Lara (30), debido a la magnitud de las lesiones en su cuerpo.
El marido agresor es Edgar Euceda Díaz (27), quien primero huyó, pero enseguida fue capturado por la Policía la misma noche. El acusado decidió someterse a una audiencia de adecuación al proceso expedito, en la que se le dictó prisión preventiva, actualmente está recluido en el Centro Penal de Comayagua.
El violento ataque ocurrió en la colonia Fuerzas Armadas de Comayagua.
El Ministerio Público busca ampliar el requerimiento fiscal contra el agresor por los delitos de tentativa de parricidio y por lesiones para que pueda pagar una condena mayor.
 La Policía confirmó que el agresor Edgar Euceda Díaz (27) se encuentra detenido.
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“Él quiso apuñalarme y yo le dije que no, que no lo hiciera por mis hijos”, manifestó la joven.
Los hechos
La mujer recuerda que todo comenzó al caer la noche, cuando Edgar Euceda Díaz llegó a la casa.
Según la víctima, “él se molestó porque estaba un muchacho en la casa y se puso celoso, me agredió, quiso pelear con el muchacho, a quien yo le dije que mejor se fuera para evitar problemas”.
Con cierta dificultad para articular palabras, la paciente reveló que cuando ella y su agresor se quedaron solos, “me golpeó la cara por dos veces con el palo del trapeador, puñetazos, me haló el pelo, me tiró al suelo y me siguió golpeando”.
 La víctima está estable y recuperándose de los golpes en la Sala de Emergencia del Hospital Escuela Universitario.
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Al preguntarle sobre si antes había sufrido violencia de su marido, ella respondió que “muchas veces desde que comenzó la relación, quizá unas 20 veces, siempre ha sido celoso, manipulador, agresivo, siempre pleitos, discusiones, separaciones por un tiempo, después regresaba pidiendo disculpas y yo creyéndole a él, siempre lo perdonaba y le daba oportunidades”.
Sobre el agresor -quien ya fue detenido- la afectada pide a las autoridades que tomen cartas en el asunto: “La verdad tengo temor que él salga libre, suplico porque tengo miedo que cumpla lo que él quiere, que es matarme”, dijo entre sollozos.
