Tegucigalpa, Honduras
Los pandilleros Francisco Ismael Castro Hernández y Raúl Antonio Ruíz recibieron una pena de 15 añoos de reclusión como autores del delito de extorsión simple en prejuicio de untestigo protegido, informó este viernes el Poder Judicial.
La decisión fue tomada por la sala III del Tribunal de Sentencia que los condenó por unanimidad de votos.
Castro Hernández y Antonio Ruíz se identificaron como miembros de una pandilla. Tendrán además que pagar una multa de 50 salarios mínimos tal como lo establece el artículo 222 del Código Penal.
El pasado 5 de Septiembre de 2014 en horas de la tarde el testigo protegido empezó a recibir llamadas telefónicas de dos personas que se identificaban como miembros de una pandilla, para exigirle el pago de 5 mil lempiras, con la advertencia que de no hacer efectivo el pago atentarían contra él y su familia.
Es así que el 11 de septiembre el testigo protegido se presentó ante la Fuerza Nacional Anti-extorsión (FNA) para denunciar el hecho.
Los agentes le recomendaron una entrega controlada logrando así la captura de los encausados a inmediaciones del mercado Zonal Belén en Comayagüela en el momento que el testigo protegido hacía la entrega del valor exigido.
Los pandilleros Francisco Ismael Castro Hernández y Raúl Antonio Ruíz recibieron una pena de 15 añoos de reclusión como autores del delito de extorsión simple en prejuicio de untestigo protegido, informó este viernes el Poder Judicial.
La decisión fue tomada por la sala III del Tribunal de Sentencia que los condenó por unanimidad de votos.
Castro Hernández y Antonio Ruíz se identificaron como miembros de una pandilla. Tendrán además que pagar una multa de 50 salarios mínimos tal como lo establece el artículo 222 del Código Penal.
El pasado 5 de Septiembre de 2014 en horas de la tarde el testigo protegido empezó a recibir llamadas telefónicas de dos personas que se identificaban como miembros de una pandilla, para exigirle el pago de 5 mil lempiras, con la advertencia que de no hacer efectivo el pago atentarían contra él y su familia.
Es así que el 11 de septiembre el testigo protegido se presentó ante la Fuerza Nacional Anti-extorsión (FNA) para denunciar el hecho.
Los agentes le recomendaron una entrega controlada logrando así la captura de los encausados a inmediaciones del mercado Zonal Belén en Comayagüela en el momento que el testigo protegido hacía la entrega del valor exigido.
